El sol se despide más tarde, la brisa nocturna se cuela como un susurro entre los pinos, y las carreteras costeras se convierten en pasarelas rodantes de elegancia. No hay mejor excusa para bajar la capota, subir la música y dejarse llevar por la magia de un coche que no sólo transporta, sino que proyecta estilo, libertad y puro deseo. Hablamos, por supuesto, de descapotables de lujo. Y este verano, estos son nuestros favoritos (y los de algunos famosos que saben lo que es vivir bien).
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Bentley Continental GTC: la realeza sobre ruedas
Si lo que buscas es sofisticación atemporal, el Bentley Continental GTC es el rey. Con su motor W12, su tapicería de cuero cosida a mano y su estética de club británico en versión futurista, este cabrio es puro arte rodante.
Quién lo tiene: David Beckham, icono de estilo dentro y fuera del campo, ha sido visto conduciendo su GTC en Los Ángeles. Lo elige por su equilibrio perfecto entre lujo clásico y potencia contenida.
Ideal para: una cena en Marbella, con el mar reflejando el brillo de su carrocería negra.
Porsche 911 Cabriolet: la leyenda no se equivoca
No necesita presentación. El Porsche 911 Cabriolet es una joya deportiva que se reinventa cada año, pero mantiene ese aire de icono eterno. Ágil, rápido y sorprendentemente cómodo, su diseño sigue robando corazones.
Quién lo tiene: Kendall Jenner lo luce en color blanco por las calles de California. Es uno de sus imprescindibles de verano, junto a la limonada y sus gafas retro.
Ideal para: conducir al atardecer por la Costa Brava, con ese sonido inconfundible de motor como banda sonora.
Ferrari Portofino M: pasión al rojo vivo
Este verano, el Portofino M (la evolución del Ferrari Portofino) arrasa. Es el descapotable ideal para quienes quieren sentir que cada noche de agosto es una declaración de intenciones. Diseño italiano, alma deportiva y una aceleración que te pega al asiento.
Quién lo tiene: el chef Gordon Ramsay es un devoto ferrarista, y el Portofino es uno de sus caprichos más recientes. Lo ha llevado incluso a rodajes de sus programas.
Ideal para: cruzar la autopista hacia Sotogrande mientras todos se giran a mirar.
Rolls-Royce Dawn: el lujo de no necesitar presentación
Aquí hablamos de otro nivel. El Dawn no es un coche, es una experiencia sensorial. Silencioso, majestuoso, tapizado como una suite de hotel en la Provenza. Es para los que ya lo han tenido todo y todavía quieren más.
Quién lo tiene: Jennifer Lopez, por supuesto. Fotografiada en Miami con su Dawn blanco perla, lo elige porque refleja exactamente lo que es: puro lujo sin disculpas. Uno de nuestros descapotables de lujo favoritos.
Ideal para: una escapada de medianoche en la Toscana, con la luna como copiloto.
Mercedes-AMG SL 63: potencia con traje de gala
Mercedes ha recuperado el espíritu original del SL y lo ha convertido en una bestia refinada. El AMG SL 63 es rápido, contundente, pero también elegante y cómodo. Y, por supuesto, lleno de tecnología.
Quién lo tiene: Lewis Hamilton. Porque incluso cuando no compite, quiere sentir velocidad y control. En su versión personalizada, por supuesto.
Ideal para: salir de cena en Ibiza, sin prisa, pero sabiendo que puedes dejar atrás a cualquiera si quieres.
Audi R8 Spyder: el deportivo que también sabe seducir
El Audi R8 Spyder combina potencia bruta con diseño minimalista y tecnología alemana. Su motor V10 ruge con elegancia, y su silueta afilada lo convierte en uno de los descapotables de lujo más codiciados del verano. Tiene ese aire de superdeportivo que no necesita gritar para imponerse.
Quién lo tiene: Tom Holland, el actor que da vida a Spider-Man, lo conduce por las colinas de Hollywood. Es joven, exitoso y adicto a la adrenalina: igual que su coche.
Ideal para: recorrer la carretera entre Cadaqués y Roses, con el mar a un lado y el viento como banda sonora.
