El fabuloso vino más emblemático de Bodegas Cepa 21 con el que José Moro lanza su proyecto más personal
José Moro, presidente de Cepa 21, llega con su proyecto más personal en el que queda palpable su personalidad, su buen hacer y su amor por la tierra que lo vio nacer en forma de vinos con alma. Malabrigo 2019 es el vino más emblemático de Bodegas Cepa 21, un Ribera del Duero que forma parte de la gama alta de la bodega.
- José Moro: «Cepa21 es una ilusión, un revivir»
- José Moro y el Padre Ángel, unidos en favor de la infancia
A veces es un olor, otras un sabor y, en muchas ocasiones, un recuerdo lo que hace que sintamos esa sensación placentera de tocar el cielo con los dedos. Malabrigo es el elixir que tomar para rendirnos a los encantos de este tesoro que emana de la tierra; la añada 2019 es la última que ha lanzado al mercado. Una anécdota, José Moro iba con su padre al campo cuando era pequeño y los días de mucho frío se llevaban la botella de vino para abrigarse, porque ni el mejor de los abrigos les era suficiente. Así nace el nombre de ‘Malabrigo’.
Elaborado a partir de uvas tempranillo, tiene una crianza en barrica de roble francés, lo que da como resultado un vino con gran personalidad; es un tinto con matices especiados y aromas a fruta negra, equilibrado, con calidez y amabilidad, pero a la vez con peso y potencia.
Su fuerte personalidad marca un antes y un después en todo aquel que lo prueba, un toque único que aporta su creador: «El vino es el gran catalizador de las relaciones humanas y nosotros a través de Malabrigo queremos llegar al corazón de las personas, despertar emociones y que cada brindis sea un momento único e irrepetible», explica José Moro.
Igual de intensa que la relación padre-hijo es el vínculo forjado entre este vino y su creador. La primera añada de Malabrigo vio la luz en 2009 y, desde entonces, esta unión ha ido in crescendo y retroalimentándose de una y otra parte. «Es un vino con alma», destaca José Moro. Solo las mejores uvas tempranillo de la parcela Malabrigo están implicadas en la elaboración de esta referencia; esto, unido a la experiencia, el conocimiento y la destreza de Moro, da como resultado un vino redondo que ha ido evolucionando y creciendo a la par que el bodeguero.
José Moro tiene todo a su favor para hacer historia y convertir en leyenda a su tinto más potente, Malabrigo 2019. Como presidente de la bodega, está entregado a Cepa 21, un proyecto vitivinícola innovador que le ilusiona de forma especial desde que lo concibió, siendo Malabrigo una de sus grandes creaciones en esta nueva etapa y un fiel reflejo de ese mantra que resuena en su mente: «Hay que dejar huella para alcanzar la cima».