Gastro

Semana Santa: descubrimos el secreto de las torrijas de Pastelería Mallorca

Las torrijas de Mallorca/Foto: Cool the Lifestyle

Las torrijas son un postre típico de la Semana Santa española. Un dulce cargado de tradición que en el fondo, se trata de una receta sencilla y de ‘aprovechamiento’ que data de tiempos inmemoriales. Nos tenemos que remontar a la Edad Media para encontrar sus orígenes y en el mundo, las versiones y opciones similares se multiplican. De hecho, muchos son los que ven a la nuestra como: «la versión castiza de las french toats». 

En COOL celebramos la vanguardia pero también, valoramos la tradición por lo que en estas fechas tan señaladas hemos decidido fijarnos en las torrijas clásicas que cada año hacen en la ya longeva y reputada, Pastelería Mallorca. Una receta secreta que ha pasado de generación en generación y que hoy, de la mano de sus propios dueños, intentamos descubrir.

Foto: Cool

«Aunque sea un producto humilde, nosotros le damos el trato especial que se merece. Elaboramos un pan especial para que cada torrija sea un bocado jugoso. Para darle el toque dulce aromatizamos la leche con la que las bañamos. Hecho en nuestro obrador», aseguran desde Mallorca a esta publicación, ensalzando una tradición que ha perdurado a través de los siglos y que es todo un símbolo

El secreto mejor guardado 
Foto: Cool

«El secreto de nuestras torrijas es utilizar una leche fresca bien infusionada a la temperatura perfecta y nunca fría cuando preparamos el brioche. Además la fritura siempre tiene que ser muy fuerte y rápida para conseguir un buen dorado sin que quede aceitoso», explica a COOL Pablo Moreno, Jefe responsable de obrador y 4ª generación de los Moreno, la familia que lleva al frente de Mallorca desde su fundación en 1931. Un buen pan de brioche calado en leche e infusionado con canela y piel de naranja y limón, otra de las claves de esta delicia.

 

La pastelería madrileña cumple este 2021 nada más y nada menos que 90 años y la torrija, sin lugar a dudas se ha convertido, como otros muchos productos como sus clásicos torteles y ensaimadas, en su seña de identidad. Con el pasar de los años han conseguido un producto que respeta la tradición pero a la vez, lleva impregnado su sello indiscutible. Se ofertan en dos tamaños pero, en ambas versiones, el color tostado, el plus de sabor y la ausencia de grasa excesiva algo que, se agradece porque de por sí, éste es un dulce calórico.

Torrijas con trufa en temporada
La torrija de trufa / Foto: Pastelería Mallorca

La emblemática Pastelería Mallorca se encuentra celebrando su 90º aniversario este año y, para conmemorarlo, la marca ha puesto en marcha diferentes acciones y colaboraciones muy especiales que tienen como fin hacer de esta fecha tan señalada algo inolvidable. Una de estas novedades llegó de la mano del chef Nino Redruello con la presentación de una torrija clásica con crema semi batida y trufa negra de temporada.

La torrija de Mallorca aderezada con una crema semimontada de chocolate blanco y trufa que, evocando a la stracciatella, da todo el protagonismo a la intensidad de la trufa y la cremosidad del chocolate blanco. Además, el plato se finaliza rallando en el momento de servirlo trufa negra fresca. Debido a este toque exquisito y gourmet, de esta postre solo podemos disfrutar durante la temporada de trufa negra que va de

“Queríamos lanzar un producto cápsula con una temporada reducida y nos pareció perfecto utilizar nuestra torrija, la versión castiza de la French Toast, para hacer un postre con trufa negra que tuviese un recorrido completo durante la cuaresma y la Semana Santa. El lanzamiento de la torrija de trufa junto a Nino Redruello será la primera de las colaboraciones que tenemos previstas para celebrar nuestro 90º aniversario. Tras la gran acogida que tuvo la tarta de queso Fismuler el año pasado, lo más natural para nosotros era comenzar este ciclo de colaboraciones con él”, asegura Carlos Árevalo, Director de Tiendas de la pastelería.

Los inicios de Mallorca

Bernardino Moreno y su esposa María García abrieron en 1931 las puertas de su primera pastelería. El primer local de Mallorca fue el de Bravo Murillo 7. Desde el primer momento esta pareja emprendedora tuvo muy claro que su   objetivo era dar lo mejor de sí a través de sus ensaimadas y torteles recién hechos y elaborados en su obrador. Lo que seguramente no sospechaban en ese momento, es que estaban creando una empresa familiar que perduraría durante décadas y que esa solo era la primera de las muchas tiendas que desde Pastelería Mallorca se irían poniendo en marcha en Madrid, convirtiéndose en enclave de visita obligada para los amantes de las cosas bien hechas y escenario de celebraciones, encuentros y recuerdos inolvidables para el exigente público de la capital española.

La tarta de queso de Fismuler que se ofrece en Mallorca

Ahora,  con motivo de su aniversario, Pastelería Mallorca posee un nuevo catálogo que, manteniéndose fiel a los valores y filosofía de la marca, es toda una declaración de intenciones con vistas de futuro. Con nuevas incorporaciones como el Kouign Amann, el Cronut, la Cookie salada de chocolate, la Cake de naranja, la Tarta de queso de Fismuler o una Carrot cake reinventada entre sus filas, esta novedosa propuesta es el resultado de una exhaustiva labor de escucha de las necesidades del cliente por parte del equipo de Mallorca durante los últimos años.

Por nuestra parte, creemos que las torrijas no pueden faltar en una buena mesa de Semana Santa y las de Mallorca son una opción más que apetecible para sumergirnos en un mundo de sabor y tradición a través de este sencillo pero delicioso bocado centenario.