La popularidad del norte ha ido creciendo con los años y se ha convertido en uno de los destinos favoritos para visitar, en definitiva, un regalo único. Su entorno verde, cultura y gastronomía conquistan a todos los que deciden hacer una pequeña escapada para deleitarse con un entorno que es único. Da igual cuál de sus tres ciudades principales visites, que siempre se descubre algo nuevo y la versatilidad del entorno te permite hacer una escapada sobre el asfalto o envuelto en la naturaleza. Aparte de los planes, descansar es algo primordial. Estos son los hoteles perfectos si quieres regalar una escapada para el Día del Padre.
Sobre estas líneas, hablamos de esos hoteles de referencia, tanto de los conocidos como los menos conocidos, que permiten vivir la esencia de la zona: naturaleza, gastronomía y cultura.
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Akelarre (San Sebastián)
Para comenzar a definir este lugar, no podemos calificarlo de mejor de lo que hacen ellos: «Hay un hilo azul que conecta todos los espacios. Un hilo que perfila los límites de lo posible, que busca la excelencia en cada detalle. Un hilo vasco, cantábrico, bravo, que define la esencia del universo Akelarre: el mar». Creado por Pedro Subijana, el prestigioso chef con tres estrellas Michelin, el espacio destaca por ser el hogar de su aclamado restaurante que lleva el mismo nombre. La Suite Akelarre es perfecta para regalar en el Día del Padre, puesto que la experiencia comienza con un amplio ventanal que lleva de luz la habitación, decorada con madera en tono claro y, además, cuenta con una piscina climatizada que regala unas increíbles vistas al cantábrico. Aquí, la naturaleza se vive de otra manera.
Palacio de Arriluce (Getxo)
Este hotel muestra una parte diferente de País Vasco, huyendo de los clásicos espacios de ciudad, con una reinterpretación propia del lujo. Desde el exterior se puede admirar la esencia vanguardista del que fue el primer palacete familiar de Neguri del siglo XX. El pasado de uno lo contemporáneo, con un resultado que se plasma en su interior. La Suite Arriluce refleja excelencia y lo notamos en sus paredes verdes con molduras, una imponente terraza que mira directamente al mar, todo unido a una belleza artística que se refleja en cada detalle. Un entorno para conocer una de las zonas más desconocidas de País Vasco.
Hotel Palacio de Samaniego (Álava)
Cada piedra que forma esta construcción, nos cuenta las historias que se han vivido en este palacio tardío del siglo XVII, a la vez que muestra la riqueza artística que posee. Sus propietarios hacen de la hospitalidad un arte y ese es uno de los principales motivos por los que se convierte en uno de los regalos perfectos para el Día del Padre. Los colores combinan de una manera cálida, pero modesta, y aunados forman la personalidad de su confortable decoración. Las habitaciones destacan por su sencillez, amuebladas con muy buen gusto y piezas de diseño, además de contar con detalles que se adaptan al confort más moderno.
Hotel María Cristina (San Sebastián)
No podíamos terminar estas recomendaciones para regalar una escapada única al País Vasco por el Día del Padre sin mencionar una de sus grandes joyas. Son muchas las caras conocidas que han pasado por este espacio y no sólo por el Festival de San Sebastián, ya que Elisabeth Taylor, Audrey Hepburn, Lana Turner, Coco Chanel, Woody Allen y Mick Jagger son algunos de los nombres que lo han disfrutado a lo largo de su historia. Su suite homónima es el remanso de paz perfecto para observar el cantábrico desde las alturas y disfrutar del lujo de la ciudad. Su decoración parte de una sobriedad, con ciertos toques históricos e incluso, en algunos momentos, ostentosos, que conectan con un amplio baño y salen a una terraza con personalidad que regala unas vistas únicas.
