Restaurantes que descubrir en Menorca
La isla de Menorca es una de las grandes desconocidas del archipiélago Balear. Calma, salvaje, singular, especial… Menorca se sale de la esencia del Mediterráneo en muchos aspectos. Su esencia hace que se distinga de sus vecinas Ibiza y Mallorca, y eso se nota también su gastronomía y en sus direcciones foodie. Menorca apuesta por el pescado y la tradición, pero también hay resquicios de esos restaurantes fusión que abundan en las otras islas. Menorca elige lo mejor de lo mejor y lo hace suyo. Si visitas la isla este verano, apunta este listado. Restaurantes de Menorca donde comer y cenar.
Sa Llagosta (Carrer de Gabriel Gelabert, 12. Fornells)
El primero de los restaurantes de Menorca donde hacer una parada es en el pueblo norteño de Fornells. Allí se encuentra Sa Llagosta, uno de esos sitios que han traspasado fronteras insulares por la fama de su langosta que, evidentemente, da nombre al lugar. Sus arroces y sus calderetas con este protagonista del mar son icónicas en toda la isla… Y muchos se trasladan a este pueblo blanco en el paisaje agreste del norte solo para disfrutar de las bondades de su cocina.
Si no tenemos la suerte de que un menorquín nos invite a su casa a disfrutar de este clásico de la cocina menorquina, Sa Llagosta es una buena opción.
Sa Pedrera d’es Pujol (Camino des Pujol, 14. Sant Lluís)
Daniel Mora capitanea Sa Pedrera d’es Pujol. Nacido en 1969, desde entonces se convirtió en lugar de referencia gastronómica en la isla. Daniel y su mujer son asturianos, pero rescatan las tradiciones menorquinas en su cocina.
Esa fusión del Cantábrico y del Mediterráneo forma parte de la esencia de este restaurante, dentro de ese Olimpo gastro de la isla de Menorca.
El Rais (Moll de Llevant, 314. Maó)
Es uno de los restaurantes de Menorca más icónicos del puerto de Mahón. Un restaurante con grandes cristaleras con vistas al mar donde se puede disfrutar de la gastronomía de los artífices de Ses Forquilles. Podemos disfrutar de sus arroces pero también de platos donde la gastronomía fusión está presente.
¿Algunos ejemplos? Gyozas de «Porc Negre» con Hoison y polvo de corteza; carbonara de «esperdanyes»; coca planchada de sobrasada de porc faixat y miel; pluma ibérica a la brasa con velouté de pimientos asados en aceite de Menorca…
Es Molí de Foc (Carrer de Sant Llorenç, 65. Sant Climent)
Ubicado en mitad de la isla, en la localidad de Sant Climente, Es Molí de Foc es uno de los restaurantes que ofrece los mejores arroces de la isla. Se llama así porque está ubicado en un antiguo molino del siglo XIX. Un restaurante con decoración modernista repleto de obras originales de diferentes artistas.
Un ambiente en consonancia con las inquietudes artísticas de su dueño, Vicent Vila. Además de los arroces, los productos locales tienen gran protagonismo en la carta. Llevan 25 años haciendo disfrutar a los menorquines de su gastronomía. Por algo será.
Smoix (Avinguda de Jaume I el Conqueridor, 38. Ciutadella de Menorca)
Ubicado en un hotel de aspecto industrial del mismo nombre -aunque por fuera es la clásica casa inglesa de Menorca-, Smoix es uno de los últimos restaurantes de gastronomía contemporánea que ha abierto sus puertas.
«Producto de temporada con sello propio y aire industrial», así se definen. La carta le da protagonismo a los productos de temporada, siempre con un aire de vanguardismo que se palpa en el menú y en los platos. Y en los platos se palpa de manera literal. Otra de esas direcciones gastronómicas que hay que tener apuntadas. ¿Algo un poco más tradicional? También podemos optar por el restaurante Rels.