Las firmas de lujo también tienen su presencia en el mundo de la gastronomía. Ralph Lauren y sus cafés, por ejemplo. O Fendi, con su presencia en Italia, que ha montado pop ups para disfrutar de riquísimas meriendas. Gucci es otra de las casas que ha apostado por la gastronomía, y su Gucci Osteria es prácticamente famosa en todo el mundo, gracias a la dirección gastronómica que depende de Massimo Bottura -amigo de la infancia, por cierto, . Tienen presencia en Los Ángeles, tienen presencia en Florencia… Y tienen presencia en Tokyo. Precisamente la sede en el país nipón -la Gucci Osteria de Tokyo, que abrió sus puertas en 2021 en el edificio Gucci Namiki de Ginza- ha ganado una estrella Michelin. Porque Gucci se atreve con todo.
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Por un lado estos días estamos hablando de la salida de su director creativo, Alessandro Michele, de la casa. Por otro, las buenas noticias llegan a la firma con datos como este. Una de cal y una de arena, ¿no? Volvemos a las buenas y toca hablar de Gucci Osteria y de su chef, Antonio Iacovello, que tiene parte de culpa de este suceso. Es el artífice de aunar la tradición culinaria italiana y los productos japoneses que encontramos en las despensas de este país. Dos gastronomías culturalmente fuertes que unidas, la verdad, son prácticamente invencibles. De ahí que la guía Michelin haya premiado lo que se realiza en sus fogones.
¿Algunos de los platos que son perfecto ejemplo de esto que hablamos? La parmigiana que quiere ser ramen, por ejemplo, que es una unión del sur de Italia con el Japón más ancestral. Massimo Bottura y Karime López son los que fijan la filosofía que deben seguir los restaurantes de todo el mundo, pero cada uno de ellos tiene su propia personalidad. En la Gucci Osteria, con los platos que estamos hablando, es más que evidente. Y es que desde el restaurante explican que para Iacovello tradición rima con imaginación -y así es-, lo que le sirve para establecer un diálogo entre estos dos países.
Y si, Italia está presente en los fogones y también en la decoración, ya que recuerda mucho a la Gucci Osteria de Florencia. El Renacimiento italiano, esa época de esplendor, se nota en muchos detalles del interior del restaurante. Cuando entramos en el restaurante no ponemos el pie en un local cualquiera, es un universo en sí mismo donde Gucci, por supuesto, está presente. Y Gucci, no hay que olvidarlo, es una firma italiana. Por lo que desprende el restaurante, por todo lo que sucede en sus cocinas, por ese matrimonio entre Italia y Japón… La Gucci Osteria de Tokyo tiene su estrella Michelin bien merecida.
