Escapada a Roma para refugiarte en la belleza de sus jardines legendarios

Jardines de Ninfa Roma
Foto: Getty
Ana Márquez
  • Ana Márquez
  • Mi sueño era convertir mi pasión en profesión, y lo conseguí. En cuanto terminé la carrera de periodismo entré en el mundo editorial y no he parado de escribir sobre moda, belleza, cine y estilo de vida para importantes cabeceras como COOLthelifestyle. Me encanta aprender y enseñar, tanto que soy docente de Periodismo Digital y Redes Sociales en Condé Nast College. Y como curiosidad, añadir que soy imagen de una crema facial de una conocida marca y es posible que me encuentres en algún 'beauty stand'.
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Roma es de esas ciudades a la que siempre vuelves. Es un tesoro de historia, arte y cultura. Más allá de sus icónicos monumentos y ruinas antiguas, la ciudad eterna posee una red de jardines que ofrecen un oasis de serenidad y belleza. Así pues, no conoces bien Roma hasta que exploras estos legendarios espacios, que cuentan historias de siglos pasados y ofrecen una experiencia más relacionada con la calma. Sofitel Rome Villa Borghese, en colaboración con Stendhal Tours, han preparado un itinerario de cinco días para el mes de mayo que recorre los jardines más increíbles, algunos han servido como lugar de meditación en el siglo XIII. Sin duda, una amanera muy primaveral de (re)visitar Roma.

Un viaje a Roma no está completo sin explorar estos legendarios jardines, algunos de ellos poco conocidos y muy mágicos.

Villa Borghese

El primer día, comienza con la visita de los jardines de Villa Borghese. Originalmente un viñedo, los jardines fueron creados a principios del siglo XVII por la familia Borghese que apostó por un diseño paisajista de estilo inglés. Hoy en día sigue igual y ofrece una mezcla de naturaleza y arte con espacios abiertos. Al caer el sol, la velada concluye en Settimo, el restaurante en la azota del hotel Sofitel Rome Villa Borghese que cuenta con vistas panorámicas de la ciudad.

Jardines Roma
illa Borghese / Foto: Pinterest.

Jardines del Vaticano y Palazzo Colonna

Al día siguiente, la parada es en los Jardines del Vaticano, un lugar de acceso muy restringido. El jardín ocupa más de la mitad de la Ciudad del Vaticano y es el lugar de meditación de los Papas desde 1279, cuando el Papa Nicolás III trasladó su residencia al Vaticano desde el Palacio de Letrán.

Vaticano
Jardines del Vaticano / Foto: Vatican

El siguiente destino es Palazzo Colonna, uno de los palacios privados más grandes y antiguos de Roma. Los jardines lucen un diseño barroco con fuentes, estatuas de mármol y flores dispuestas geométricamente.

Jardines del Lacio

Los jardines del Lacio se visitan el tercer día, en concreto Landriana, que es un lugar tremendamente romántico, y Ninfa. Este último cuenta con plantas exóticas y ruinas recubiertas de flores trepadoras (foto de portada).

Jardín de Ninfa Roma
Jardines de Ninfa / Foto: Pinterest.

Es famoso por sus jardines renacentistas, considerados unos de los más bellos y mejor conservados del diseño de jardines italiano. Un lugar único, quizá uno de los más mágicos del mundo con una explosión de colores y aromas inusual. Tras su visita, la siguiente parada es el Centro Botánico Moutan, hogar de una colección única de peonias chinas.

Palacio Parisi y Villa d’Este en Tívoli

Palazzo Parisi es una casa fortificada medieval que cuenta con magníficos jardines supervisados ​​por la reconocida paisajista Arabella Lennox-Boyd. 

Jardine Roma
Villa d’Este / Foto: Italia.it

El viaje continúa hacia Villa d’Este en Tivoli, declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. La villa en sí es una obra maestra de la arquitectura renacentista, pero es el jardín el que realmente cautiva a todo aquel que va. El jardín es una espectacular exhibición de elementos acuáticos, con fuentes, ninfas, grutas… y música creada por órganos hidráulicos dentro de determinadas fuentes.