Casa Palacio Don Ramón, el clásico contemporáneo del gran lujo en Sevilla

«El origen de Kaizen Hoteles tiene lugar cuando yo salgo de la empresa familiar, con 55 años, nada menos. En un principio el plan era no hacer nada, vivir la vida. Pero me di cuenta de que eso de vivir la vida no me gustaba tanto, era muy aburrido. En aquel entonces mi marido y yo estábamos buscando casa en Jerez y encontramos en venta el Casino Jerezano. Y ahí se me ocurrió la gran idea: montar un hotel. Yo necesitaba actividad empresarial y decidí montar un hotel que fuese un producto muy especial, de alto nivel, sin complicarme mucho la vida… Lo que pasa es que de un hotel, pues pasé a otro, luego a otro, luego a la ampliación del primero, ahora me queda la ampliación del segundo y del tercero y al final nos hemos metido en todo este lío sin el que no puedo vivir», nos cuenta Marisa Díaz de Azcárete, presidenta de Kaizen Hoteles.

Kaizene es una palabra de origen japonés. ‘Kai’ significa cambio y ‘Zen’ se traduce ‘para algo mejor’, es decir, cambio hacia algo mejor, un significado que conlleva una evolución continua, una inquietud, un impulso hacia la auto superación. Es la filosofía de gestión de la calidad, que busca la excelencia mediante la implicación plena de todos los integrantes de una empresa.

«En todos nuestros proyectos solemos tirar abajo la estructura entera, pero siempre cuidando el patrimonio. Le metemos toda la tecnología posible y lo volvemos a reconstruir, con todo el patrimonio recuperado que tenía. Entonces nos quedamos con un hotel, que tiene mucha tecnología, que es lo que da gran parte del confort, sin perder la esencia: aislamientos acústicos, aislamientos térmicos, eficiencia energética, geotermia, aerotermia, sistemas antihumedad, los últimos sistemas de aire acondicionado y climatización hipersilenciosos… El conjunto de todas estas tecnologías es lo que te da esa sensación de confort. Y luego el patrimonio. Recuperamos todo el patrimonio que hay en estas casas maravillosas de hace muchos siglos y lo volvemos a integrar en la casa. Finalmente, lo complementamos con una decoración de calidad, que yo creo que es lo que nos diferencia como hotel de cinco estrellas Gran Lujo».

Kaizen Hoteles es un grupo de gestión hotelera que ofrece servicios de excelencia en destinos turísticos más allá de los circuitos convencionales, fomentando la riqueza del entorno en el que se ubican sus hoteles. El grupo apoya la recuperación y el mantenimiento de las tradicionales casas andaluzas y de edificios históricos, sorprendiendo a sus clientes y superando sus expectativas. Los hoteles Kaizen son una parte esencial de la experiencia del viaje.

«Nos diferencia la calidad; la calidad de los muebles, hechos a medida, no comprados en grandes empresas que venden miles de muebles del mismo estilo, la calidad de los textiles, la calidad de las telas, de las cerámicas, de los elementos decorativos, de las escayolas, de los adornos… Esa calidad es lo que yo pienso que le da también ese Gran Lujo. Y luego, por supuesto, lo que cierra el círculo es el servicio. Es un personal educado en la excelencia. Lo que nosotros queremos no es que el cliente se sienta como en su casa, ni muchísimo menos. Nosotros queremos que el cliente se sienta viviendo una experiencia muy especial. Queremos que el cliente se sienta único, se sienta especial, se sienta como el rey, se sienta como si fuera la única persona que estuviera en todo el hotel, magníficamente atendida y luego disfrutando de cada detalle, de esa calidad, de ese servicio, de ese alojamiento tan especial, que llegue a la habitación y descubra todos los grandes y pequeños detalles que tiene… Que sea una experiencia para él y que el hotel sea parte de su álbum de fotos del viaje. Tú vienes a Sevilla, conoces Sevilla, te apasiona Sevilla, te enamora Sevilla, pero te enamora Sevilla desde el sitio donde vienes a alojarte. Ese es nuestro concepto».

Casa Palacio Don Ramón 5* GL

Casa Palacio Don Ramón 5* GL es la materialización del sueño de un hombre que vela porque su legado sea siempre la esencia de la elegancia. La inteligencia y la versatilidad son denominadores comunes a la elegancia. Y, es precisamente así, cómo supo Don Ramón entender el futuro, adelantarse a él y preparar la casa de sus sueños para las necesidades del siglo XXI.

El hotel está situado en una localización privilegiada en el centro de Sevilla, ocupando uno de los edificios más emblemáticos de la ciudad. Y, gracias a su ubicación, los huéspedes de Don Ramón podrán disfrutar de todos los enclaves turísticos y puntos de interés de la ciudad con cortos paseos.

«Don Ramón tiene el mismo concepto que tienen los demás hoteles Kaizen. El hotel tiene que ser la esencia de la ciudad. Primero, la localización; tiene que estar localizado en el mejor sitio de la ciudad. Un cliente de un hotel de cinco estrellas Gran Lujo tiene que estar a minuto y medio de lo realmente bueno, del centro de la ciudad. Y luego tiene que ser la esencia de la ciudad. El Rocío es una casa rociera y el María Luisa es una Casa Palacio jerezana, pero traído al siglo XXI. ¿Por qué? Porque estas ciudades y nuestros clientes son del siglo 21. No nos gusta vivir en el 16 ni queremos ir a un hotel que sea un museo. Si estamos en Sevilla queremos sentirnos en Sevilla, pero en la Sevilla actual. Todas estas claves las cumple nuestro delicioso proyecto».

Las más avanzadas tecnologías, geotermia y eficiencia energética, insonorización y aislamiento térmico, así como el más noble mobiliario y los avances que permiten conectar la casa con el mundo, recorren cada rincón de este hotel de cinco estrellas Gran Lujo.

«El Gran Lujo es ofrecer al cliente. Tienes que tener todo lo que tienen los cinco estrellas. Por supuesto, por normativa; desde las zapatillas, los albornoces, los secadores, los metros cuadrados que necesitas, las camas maravillosas, la ducha estupenda, la presión… Pero, además, el Gran Lujo es calidad. Tú entras y tienes unos muebles muy especiales, telas, textiles, mármoles, decoración… Todo es de mucha calidad».

«Pedro Rodríguez de Pineda, que es el arquitecto de este edificio, ha hecho una labor impresionante. Era un edificio que estaba muy descuidado, del XIX, pero tenía unos patios maravillosos, los cuales conserva, una esencia única. Él supo ver el valor que tenía. Ha hecho un trabajo impecable, en las tres plantas que tiene el edificio. Por otro lado, Alejandra Pombo, de Madrid, ha sido la decoradora y es otra que ha hecho un trabajo fabuloso. Tú cuando entras aquí te sientes en Sevilla. Pero una Sevilla del siglo XXI».

De esta forma, sin perder la esencia elegante y señorial que caracteriza a Don Ramón, entre sus paredes cada huésped puede sumergirse y deleitarse en el silencio, disfrutar de la temperatura perfecta, en una invitación permanente a sentir la comodidad y el lujo del descanso.

Casa Palacio Don Ramón dispone de distintos tipos de habitaciones con una atmósfera única y una personalidad propia que se adaptan a las necesidades y deseos de cada huésped. Fruto del excelente trabajo de la decoradora Alejandra Pombo, las habitaciones del hotel son elegantes, de estilo rústico, pero con una decoración exquisita y contemporánea, perfectamente acordes a la personalidad del hotel y la esencia de la ciudad.

«En Don Ramón todo es alrededor de los cinco sentidos. Don Ramón es una experiencia, es un hotel, pero para disfrutar con los cinco sentidos. El oído; es curioso, pero cuando llegas aquí, notas el silencio. El hotel está aislado acústicamente. Ese silencio que de repente te da paz y que te deja conectar contigo mismo, sin ruido de la calle. El tacto; todo lo que tocas, todos los textiles, las maderas, los hierros… Hay mucho trabajo artesanal, los cristales por ejemplo son soplados a mano. El tacto juega muchísimo en este hotel. La vista; cuando entras en Don Ramón ves belleza, miras a los techos, todos decorados, los suelos son una preciosidad, en mármoles negros y blancos…. Todo está hecho para entrar por la vista, cada pequeño y gran detalle. El gusto; tenemos el restaurante El Limón. La gastronomía es parte de Sevilla, parte de los hoteles y parte de nuestra vida. Hay mucha gente que visita una ciudad, nada más que porque le atrae la gastronomía, para degustar los productos de esa ciudad. La gastronomía empieza a ser importantísima en nuestras vidas, de ahí nuestro especial restaurante. El olfato; una esencia de azahar con un poquito de jazmín, una esencia que nos han hecho para nosotros. Para mí Sevilla huele a azahar. Sevilla son cítricos, son esos naranjos que hay por todas partes. Esa esencia cítrica que hace que Sevilla huela a azahar en primavera y así huele Don Ramón».

Con la apertura de las puertas de su hogar, el sueño de Don Ramón es que cada visita y cada experiencia en Casa Palacio Don Ramón permanezca de forma perenne en el recuerdo de sus huéspedes como sinónimo y recordatorio de que no hay mayor lujo en Sevilla que alojarse en su casa y disfrutar plenamente del legado de la elegancia.

«Sevilla es impresionante, así como en otros sitios ha costado un poquito más el darlo a conocer, el que nos conozcan… Sevilla es un espectáculo. La gente entra, curiosea, se queda. Nos ha pasado algo que no nos ha pasado en otros hoteles, que es gente entrando desde la calle pidiendo habitaciones. Estamos teniendo unos ratings buenísimos y estamos orgullosísimos de cómo está resultando este proyecto».