No es la primera vez que el restaurante estrella Michelin Costiña protagoniza uno de nuestros artículos. Este templo gastronómico situado en Santa Comba, A Coruña, tiene fama mundial y comer allí, es todo un deleite y una experiencia para disfrutar. Un festín de sabores que se entrelazan creando sensaciones diferentes que no podíamos perdernos. Por ello, decidimos arrancar el 2022 comiendo en Costiña y disfrutando, de la experiencia que supone visitar este lugar. «Nos encontramos en Santa Comba que está, a 20 minutos de Santiago, a 50 de Coruña y a 45 del Finisterre, del fin del mundo. También, estamos en avión a 6 horas de Nueva York o, a dos horas y cuarto de París. Estamos muy cerca», asegura a COOL, con una amplia sonrisa de satisfacción, Manuel Costiña, el chef y dueño de este afamado restaurante que además, posee otros reconocimientos como dos Soles Repsol. Manuel, es actualmente la cara visible de un negocio que fundó su familia a finales de los años 30 y que, aunque comenzaron como una simple ‘casa de comidas’, fueron una visionarios que pronto, empezarían a innovar para conseguir algo, verdaderamente extraordinario.
En sus cocinas, donde se hace la magia
En las cocinas del estrella michelin Costiña, se hace magia. Hechizos hechos plato que se sienten, se huelen y se disfrutan.Entrar en este templo gastronómico gallego es toda una experiencia para los sentidos. Pasión por el su trabajo, honestidad con los productos y los productores e ilusión por mejorar cada día. Esas, son algunas de las recetas del éxito de este restaurante de lujo reconocido internacionalmente en el que pudimos disfrutar de toda su hospitalidad y de las delicias que preparan…
La cocina de Costiña se basa en el equilibrio entre materia prima, principalmente de proximidad, y el saber hacer del equipo entre fogones. Es una cocina de mercado. A diario se seleccionan en la plaza productos de máxima calidad, avalados por la exigencia y fidelidad a los mejores productores y proveedores. Predominan el respeto al sabor y la
elegancia innata de los productos, sus sabores y texturas, junto con la perfección técnica en la ejecución de cada proceso, sin artificios, sin delirios de autor, resultando una combinación eficaz de tradición e innovación. Sus platos y postres llevan la firma del chef Manuel García García que en 2020 recibió una estrella Michelín.
Su menú degustación: alta cocina de temporada
«Lo que nos marca realmente son las estaciones, las temporadas del producto»
Para visitar Costiña hay que ir con tiempo porque la idea es quedarse horas allí. Sus menús degustación suponen un festín para el paladar. Una propuesta gastronómica que varía según la temporada ya que, está supeditada a los productos de temporada. «Lo que nos marca realmente son las estaciones, las temporadas del producto». Un menú compuesto por 6 aperitivos imperdibles en la zona de trastienda-bodega, 5 platos salados, selección de quesos, pre-postre y dos postres.
Lujo discreto y minimalista
«El momento que vivimos en España a nivel gastronómico es extraordinario. Lo que veo es que nos quedan muchas cosas que decir y hacer hacia el futuro»
En este restaurante si algo prima es la discreción. A pesar de sus grandes reconocimientos y fama, mantienen un perfil bajo, la sencillez es un gran valor para ellos y nunca les verás presumir de las importantes personalidades que suelen acudir a disfrutar de su impecable servicio y oferta gastronómica. Una antigua casona de piedra típicamente gallega esconde en su interior un lugar para desconectar pensado, para el disfrute sin tiempo.
«El momento que vivimos en España a nivel gastronómico es extraordinario. Lo que veo es que nos quedan muchas cosas que decir y hacer hacia el futuro», explica el chef condecorado en 2020 con una estrella Michelin.