Marta Larsen es artista por vocación y emprendedora por decisión propia. Pinta la naturaleza -flora y fauna- en tela, con pinceles y acuarelas en su taller en Madrid donde recibe a COOL para esta entrevista. De padre sueco y madre hispano argentina, creció viendo el Jardín Botánico y el Museo del Prado desde la ventana de la casa de sus padres en Madrid. Estudió la carrera de Biología y viajó por todo el mundo. Hoy sorprende con sus creaciones artesanales y sostenibles.
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Amor por la naturaleza
Su curiosidad y su amor por la naturaleza le llevaron a montar Martsen Studio, su propia empresa de venta de pañuelos de seda y manteles de lino. Creó así una firma de piezas de arte y lujo de seda 100 % natural y totalmente sostenibles.
«Desde los tintes hasta las sedas naturales y el proceso de fabricación, todo es sostenible, y nada contaminante», explica Marta. Sus creaciones encierran historias siempre de defensa de la naturaleza como, por ejemplo, dar visibilidad a especies en peligro de extinción.
«Mezclo siempre especies que cohabitan en el mismo ecosistema. Quiero transmitir conocimiento científico a través de mis creaciones. Hago un estudio profundo antes de pintar cada diseño», revela.
«Emprender ha sido toda una aventura pero estoy contenta, porque vale la pena sobre todo cuándo se hace con ilusión y con el corazón», confiesa.
«Hago colecciones pequeñas y únicas. Trece diseños de ecosistemas marinos, silvestres y de alta montaña: esa es la temática de mi primera colección. Los manteles son porque una mesa bonita siempre es un gusto verla. El producto más pequeño es el pañuelo de bolsillo de hombre. Los manteles son gigantes, de tres metros y a medida».
Todo empieza en su mesa de trabajo con los libros de inspiración de la carrera y con los pinceles… Un folio en blanco. No estudió arte, es autodidacta.
«La acuarela tiene un punto de improvisación que es muy bonito. después de pintar me pongo a digitalizar los diseños, a transformarlos en pixeles y retoco los colores en el ordenador, pero no corrijo el trazo del pulso irregular, porque eso es bonito».
Sostenibilidad
«La selección de proveedores es importante, busco que estén cercanos, de hecho todo lo fabrico en España y que sean lo más ecológicos posible».
«Me dedico a ésto por haber tenido bebés y por la pandemia. Pintar era mi vía de escape y pinté tanto en la pandemia que me pregunté qué podía hacer con tantos dibujos.. Y así nació la idea. Como arte para vestir. Nació de una época muy creativa de mi vida», recuerda sonriente.
«Con esta empresa lo que a largo plazo intento es llevar el lujo al modelo sostenible, controlando las cantidades, que se hagan piezas bajo pedido, por ejemplo. No creo mucha cantidad para no tener stock residual. Luego, sería difícil de gestionar».
Ésta es su primera colección. Son trece diseños diferentes de varios tamaños. Pañuelos y manteles. En seda natural y lino orgánico. 10 diseños diferentes de manteles y 13 de pañuelos en cuatro tamaños. Todo se vende online.
«Lo que quiero es abarcar todo tipo de productos para el hogar, para vestir y para decorar paredes. Por ejemplo acabo de crear fajines de esmoquin, en una producción muy limitada, pero con mucho éxito».
Pinta porque, como dice su madre, tiene don. La pasión de Marta Larsen por la belleza de la botánica, la fauna, flora, los ecosistemas de España y el lifestyle nórdico, hicieron que Martsen Studio cobrara vida, convirtiéndose en una firma que expresa a través de cada pieza, valores basados en el diseño, sostenibilidad, artesanía.
El resultado son piezas únicas, que hacen visible la belleza de los ecosistemas naturales que nos rodean, así como a los animales en peligro de extinción. Martsen Studio nació para crear y expresar una forma sostenible y ética de elaborar piezas de lujo.
