La historia detrás de las joyas más emblemáticas de la realeza española y británica
Cuando hablamos de joyas de la realeza, las primeras imágenes que vienen a nuestra cabeza son aquellas con los diamantes más preciados del mundo o aquellas de diseños únicos hechos por y para la Casa Real. De la misma forma que los relojes son el foco de atención de muchas puestas en escena de los mejores deportistas del mundo, las joyas son las protagonistas de las apariciones públicas de la realeza. La joyería ha sido parte importante de la Monarquía desde tiempos remotos, especialmente por las ostentosas y exclusivas piezas realizadas por las casas joyeras más importantes del mundo para adornar a reyes, reinas y a los cargos nobiliarios. ¿Te apetece conocer la historia detrás de las joyas más emblemáticas de la realeza? ¡Sigue leyendo!
El broche con diamante rosa de la Reina Isabel II
La reina Isabel II escogió este famoso broche de diamante rosa de Tanzania para lucir en los eventos más importantes. Denominado el broche Williamson, su diseño en forma de flor era el segundo broche más valioso de su colección.
Su precio supera los 34 millones de euros y su valor reside en el espectacular diamante rosa que engarza en el centro. La piedra fue descubierta en 1947 en las minas de Tanzania, y fue el geólogo canadiense John Williamson quien se la regaló a la reina, sin cortar, como regalo de boda.
Diadema prusiana de la Reina Letizia
De entre las siete tiaras que atesora la Reina Letizia, desde la Ansorena hasta la de flores, nos quedamos con la diadema prusiana, la que escogió para que la acompañara el día de su boda. No nos cabe duda de que esta sea una de las favoritas de la reina. De hecho, no es la única vez que la ha llevado, han sido unas once otras ocasiones en las que no ha dudado en ponérsela.
Su nombre se debe a que fue diseñada para la princesa Victoria Luisa de Prusia, hija del káiser Guillermo II, y abuela de doña Sofía, que la heredó al cumplir 18 años. Es una joya de estilo helénico en platino, diamante y brillantes.
Anillo de compromiso de Diana de Gales
Este espectacular zafiro lo hemos visto no sólo en el día de la boda de Diana, sino también en la mano de Kate Middleton. Y es que, tras que el rey Carlos III le pusiera el anillo a su prometida Diana Spencer, éste pasó a manos de Kate Middleton cuando aceptó ser la esposa del primogénito de la pareja.
Esta obra maestra fue creada por el joyero Garrard. Se trata de un zafiro de Ceilán de 12 quilates rodeado de 14 diamantes y montado en oro blanco.
Gargantilla de 4 hilos de perlas de Kate Middleton
Como mencionábamos antes, Isabel II tenía uno de los joyeros más impresionantes del mundo. En esta ocasión hablaremos de su gargantilla de cuatro hilos de perlas. Se trata de una gargantilla de perlas cultivadas y presentadas ante la reina por el gobierno japonés.
El joyero Garrard, el mismo que le hizo el anillo a la princesa Diana de Gales, creó esta preciosa joya. Más tarde, Kate Middleton lo usó durante la fiesta de aniversario de bodas número 70 de los monarcas.