Hay amistades que trascienden en tiempo y espacio. Amistades eternas con historia que merecen ser contadas como la desconocida e inesperada del gran artista Salvador Dalí con el genio de la peluquería Lluís Llongueras. Dos catalanes de diferente edad y profesión a los que les unía, entre otras cosas, una creatividad inagotable. Una relación de dos grandes amigos que llegó a su fin con la desaparición del pintor hace ya -este noviembre-35 años y que recoge y enaltece la exposición La Barcelona de Dalí. Una muestra fotográfica que pone en valor la relación (poco comentada) de Dalí con la Ciudad Condal y que cuenta con un espacio a profundizar en la amistad entre el artista y el peluquero.
Hasta el 1 de Diciembre (en el Museo Diocesano de Barcelona) quien quiera podrá acercarse a conocer más lo que unía a estos dos destacados personajes que llevaron -cada uno en su campo- el arte a la máxima expresión. Nosotros no quisimos quedarnos tan sólo con la información básica y por ello, hemos charlado con Ricard Mas, Comisario de La Barcelona de Dalí que con un relato apasionado, culto y cargado de anécdotas y datos curiosos, nos sumerge en la cotidianidad de dos amigos tan distintos como iguales a la vez y que supieron cada uno a su manera, dejar una huella imborrable. DALE AL PLAY y con nuestro podcast, descúbrelo todo.
- La escapada más top a Ibiza y Formentera con yate incluido alojándote donde Grace Kelly y Dalí
- Exposiciones en Madrid para disfrutar y descubrir este otoño
Instantáneas de una amistad eterna
La exposición viaja por España y diversos países europeos, y trata parte de la amistad con artistas y creadores en el marco de la Ciudad Condal, tratando la amistad del estilista con Salvador Dalí, que le marcó profundamente. No solo en términos personales, sino también profesionales: Dalí ayudó a consolidar la idea de Llongueras como artista, alguien que no solo era peluquero, sino que utilizaba el cabello como una forma de escultura y expresión artística. Esta influencia se ha visto reflejada en muchas de las creaciones capilares de Llongueras, quien llevó la peluquería a otro nivel, considerándola una forma de arte. Tal y como relata María Linares, CMO de Provalliance, «la amistad entre Lluís Llongueras y Salvador Dalí fue clave para la evolución artística de Llongueras. Su relación marcó una profunda conexión entre el arte y la peluquería, llevando el trabajo de Llongueras a un nivel innovador y creativo».
Amor por la cultura y culto a la transgresión
En definitiva, lo que verdaderamente unía a Luis Llongueras y a Salvador Dalí era su amor por el arte y la creatividad, además de una visión transgresora que rompía barreras estéticas. A lo largo de su relación, compartieron momentos significativos y colaboraron en la creación de obras artísticas y estilísticas que fusionaban el surrealismo de Dalí con la estética vanguardista de Llongueras.
Sumado a lo anterior, compartían una profundamente una visión sobre la transgresión y la innovación artística. Llongueras siempre ha sido conocido por su enfoque vanguardista y revolucionario en la peluquería, lo que coincidía perfectamente con la visión excéntrica y adelantada de Dalí en el mundo del arte. Ambos compartían el deseo de romper con las convenciones tradicionales, cada uno en su respectiva área, y explorar la creatividad sin límites. Luis Llongueras ha contado en varias entrevistas cómo fue trabajar con Dalí y destacó su peculiar sentido del humor y su genio excéntrico. La relación entre ambos se prolongó durante años, hasta la muerte de Dalí en 1989, y siempre estuvo marcada por el respeto mutuo y la admiración.