La casa de Vicente Aleixandre se convertirá en museo en el centenario de la Generación del 27
La casa de Vicente Aleixandre en Madrid es mucho más que una residencia, es un santuario de la poesía y la creatividad. En este hogar, el Premio Nobel de Literatura forjó gran parte de su obra, entrelazando palabras que capturan la esencia del alma y los paisajes de la naturaleza. Cada rincón de esta casa respira historia y arte, recordándonos el profundo legado de uno de los poetas más grandes del siglo XX. Recientemente adquirida por la Comunidad de Madrid, esta casa se abrirá tras una gran reforma como un espacio cultural que, entre otros acontecimientos, acogerá un acto conmemorativo en me memoria del centenario de la Generación del 27. Recordamos la figura del poeta mientras descubrimos los detalles del proyecto de remodelación.
La casa de Vicente Aleixandre es conocida como Velintonia debido a su ubicación en la calle homónima, en el distrito de Chamberí, Madrid. Este nombre proviene de la antigua denominación de la calle, que hacía referencia a la ciudad ficticia de Velintonia, creada por el poeta y dramaturgo José Zorrilla en su poema El Zapatero y el Rey.
La calle fue renombrada posteriormente como Vicente Aleixandre, en honor al poeta que vivió aquí gran parte de su vida. Es una casa unifamiliar de tres plantas que abarca una superficie de 630 metros cuadrados, cuenta con seis habitaciones, dos baños, jardín y un trastero.
Esta residencia, que Aleixandre habitó durante buena parte de su vida, no sólo fue testigo de su vida cotidiana y creativa, sino que también se convirtió en un punto de encuentro para algunas de las figuras más destacadas de la literatura española del siglo XX. Poetas y escritores como Dámaso Alonso, Gerardo Diego, Rafael Alberti, Luis Cernuda y Federico García Lorca, Jorge Guillén frecuentaron esta casa, convirtiéndola en un verdadero epicentro cultural.
La importancia de Velintonia trasciende su valor arquitectónico, es un símbolo de una época dorada para la poesía y la literatura en España. La casa, con una fachada de ladrillo macizo, ha sido un testigo mudo de innumerables tertulias literarias y el lugar donde se gestaron algunas de las obras más emblemáticas de Aleixandre.
Sus puertas volverán a abrirse antes de 2027 para ofrecer un refugio para quienes buscan conectar con la magia de sus versos y la literatura en general.
Un turbulento proceso de venta
Desde el fallecimiento de Vicente Aleixandre en 1984, la casa ha pasado por un turbulento proceso de venta. En 2007, los herederos iniciaron negociaciones con la entonces ministra de Cultura, Carmen Calvo, para vender la propiedad. Sin embargo, el alto precio de 6,5 millones de euros frustró la operación.
Posteriormente, la casa salió a subasta en varias ocasiones, la más reciente a comienzos de este año con un precio de salida de 4,6 millones de euros. La Comunidad de Madrid ha anunciado su adquisición y su intención de reformarla para convertirla en Casa Museo, como la de Lope de Vega.
Velintonia fue construida en 1930 y deshabilitada desde el año 1986, tras el fallecimiento de la hermana del artistas. En 2021 fue declarada como Bien de Interés Patrimonial para garantizar la conservación de su valor simbólico, además de establecer una reglas, pautas y restricciones a la hora de reformarla con el fin de respetar la esencia y conservar la arquitectura original.