Es importante que incluyas alimentos con proteínas en tu dieta habitual para asegurarte de que la ingesta diaria es la suficiente y recomendada para llevar una vida saludable. Hay varios tipos de proteínas: de origen animal y vegetal. Cuando los nutricionistas recomiendan el consumo de proteínas se refieren tanto a uno como a otro tipo. De hecho, cada vez es más frecuente escuchar a algún experto decir que no conviene abusar de las primeras. Precisamente porque hay varios tipos de proteínas conviene diferenciarlas para aprovechar los beneficios de todas.
Entre ambos tipos de proteínas existen varias diferencias que debes conocer para usarlas a tu favor y darle a tu organismo lo que necesita o teniendo en cuenta algunas carencias que tu sistema pueda tener.
Las principales diferencias entre estos tipos de proteínas son la concentración proteica (superior en las proteínas de origen animal frente a las de origen vegetal), el coste medioambiental (también más elevado en el caso de los alimentos de origen animal) y el valor biológico, también superior. Este último factor lo determina la calidad de la proteína, dada por el hecho de que los aminoácidos que la contienen son esenciales o no esenciales.
Por todo ello, y aunque las proteínas de origen animal contengan vitaminas del grupo B, A y K (siendo la vitamina B12 la única que no se puede obtener a partir de vegetales), es importante saber que un consumo excesivo de proteína animal puede resultar perjudicial para la salud ya que presenta más grasa saturada y colesterol perjudicial para la salud cardiovascular (excepto en el caso del pescado azul por su elevado contenido en Omega 3, perfecto para prevenir enfermedades coronarias). En cambio, los vegetales y sus proteínas, se relacionan con un efecto cardioprotector por su contenido en grasas insaturadas, antioxidantes y fibra.
Así pues, lo que debemos hacer al preparar las recetas de nuestro día a día, es tener esta información en cuenta y considerar la porción que podemos consumir de cada tipo, sin demonizar en ningún caso las proteínas de origen animal: pues consumidas con moderación son muy recomendables.
¿Cuál es la ración estándar de los alimentos ricos en proteínas?
Para una persona sana, lo correcto seria ingerir de 60-80 gramos de legumbres, de 100 a 150 gramos de carne o pescado y 30 gramos de frutos secos. Si deseamos incluir los huevos, dos sería la cantidad recomendada. Si tenemos en cuenta las recomendaciones diarias por edad, es interesante saber que lo indicado para un adulto son 55 gramos, siendo este valor ligeramente inferior para los ancianos, bastante menor en adolescentes y niños y muy superior en deportistas y embarazadas.
Muchos estudios determinan que las proteínas deberían aportar un 15% de la energía diaria, siendo un 50-70% de alto valor biológico, es por eso que es tan importante tener en cuenta su presencia en nuestros platos.
