Piluca Barrau, farmacéutica: «La mejor crema antiedad es el protector solar»

• Ana Márquez

Durante años, la exposición al sol ha sido sinónimo de salud, descanso y belleza. Sin embargo, la ciencia ha ido desmontando mitos y señalando con claridad los riesgos reales de una exposición solar inadecuada. Para Piluca Barrau, farmacéutica especialista en dermocosmética y divulgadora de salud, «el mejor cosmético antiedad es un protector solar aplicado cada mañana».

• Protector solar para la cara: cómo elegir el correcto según tu tipo de piel
• Los alimentos con los que Sara Carbonero se adelanta al verano para lucir una piel bronceada (sin sol)

Barrau insiste en que «aproximadamente sólo un 20% de la población utiliza protector solar todo el año», pese a que su uso diario es fundamental. «Incluso en días nublados, el 80% de la radiación ultravioleta atraviesa las nubes», advierte, recordando que también hay que protegerse en la nieve, en la playa y especialmente en zonas con superficies que reflejan el sol, como el agua o la arena.

Pero el daño no se limita a la piel. «La radiación solar también atraviesa la córnea, todas las capas del globo ocular y llega a la retina», explica. Esto puede derivar en enfermedades como cataratas, degeneración macular, cáncer en los párpados o problemas visuales crónicos. Por eso, aboga por el uso de gafas de sol homologadas: «Ponerle a un niño una gafa no homologada puede ser más dañino que si no le pones ninguna».

«Una buena vitamina C antes del protector solar potenciará la protección de la piel frente al sol»

Uno de los grandes errores que cometemos al elegir protector solar es fijarnos solo en el SPF (Factor de Protección Solar). «El SPF sólo indica la protección frente a la radiación ultravioleta B, que es la que nos quema, pero no frente a la A, ni al infrarrojo ni a la luz azul», explica. Estos otros tipos de radiación son igual de peligrosos: envejecen, manchan y degradan el colágeno de la piel.

La clave está en los fotoprotectores de amplio espectro, que además del SPF 50 deben incluir «las siglas PPD y tres símbolos positivos, que indican cobertura contra el UVA». Para reforzar la defensa cutánea, Barrau recomienda aplicar antioxidantes potentes antes del protector: «Una buena vitamina C con un pH entre 3 y 3,5 es ideal para neutralizar radicales libres».

«Un SPF 50 bloquea un 98% de los rayos UVB, pero como no nos lo aplicamos correctamente ni lo reaplicamos cada dos horas, sí se sigue sintetizando vitamina D»

Existe una creencia extendida de que usar protección solar inhibe la producción de vitamina D, pero la farmacéutica aclara: «Un SPF 50 bloquea un 98% de los rayos UVB, pero como no nos lo aplicamos correctamente ni lo reaplicamos cada dos horas, sí se sigue sintetizando vitamina D”. Además, algunas marcas ya incorporan ingredientes que permiten que parte de esta radiación penetre controladamente para facilitar la síntesis hormonal.

El cuidado de la piel no termina con la cosmética. «Existen complementos orales que ayudan a proteger la piel desde dentro, sobre todo en personas con rosácea, alergias solares o fototipos claros», dice Barrau. También insiste en el poder de la alimentación: «Una dieta rica en betacarotenos (zanahoria, mango, boniato), licopeno (tomate, sandía) y vitamina E (almendras) puede favorecer la síntesis de melanina, aunque el bronceado en sí no es saludable».

«Si tienes tendencia al melasma o hiperpigmentación, los suplementos potenciadores pueden ser contraproducentes. Siempre hay que personalizar»

Por otro lado, los aminoácidos como la glicina, prolina o lisina, presentes en alimentos como el aguacate o el plátano, combinados con minerales como el zinc (pipas de calabaza, anacardos) también ayudan. «Pero si tienes tendencia al melasma o hiperpigmentación, estos suplementos pueden ser contraproducentes. Siempre hay que personalizar”.

Una de las revelaciones más interesantes de Barrau es sobre el colágeno: «Una de cada tres proteínas de nuestro cuerpo es colágeno, pero el sol y el azúcar lo destruyen». Aconseja tomarlo en forma de péptidos activos combinados con magnesio y vitamina C. Pero advierte: «No todos los colágenos son iguales; tienen que estar formulados con los ladrillitos necesarios para que el cuerpo los asimile».

Recuerda:

• «El mejor cosmético antiedad es el protector solar. Así, sin más».
• «Una gafa de sol no homologada puede ser peor que ninguna. La pupila se abre y permite que entre más radiación».
• «Un bronceado nunca es saludable. Un tono dorado puede parecer bonito, pero siempre indica daño en la piel».
• «El azúcar y el sol son los grandes enemigos del colágeno».
• «Un antioxidante tópico debe tener un pH de entre 3 y 3,5. Si no, no sirve».
• «Nos ponemos mal el protector, en poca cantidad y no lo reaplicamos. Por eso seguimos sintetizando vitamina D».
• «Hay que tomar colágeno con tripéptidos y magnesio. Si no, no funciona».
• «El empeine, las orejas y el escote son las zonas más olvidadas al aplicar fotoprotector».

Recomendaciones COOL

Heliocare 360º Acnimat SPF 50+, fotoprotector facial de uso diario especialmente formulado para pieles grasas o con tendencia acnéica. Desarrollado en colaboración con centros de investigación de referencia como la Universidad Autónoma de Madrid o la Harvard Medical School, esta fórmula no sólo protege frente a las cuatro radiaciones solares, sino que mejora la sínteis de la vitamina D.

De Longevitas Lab, el bisglicinato de magnesio es la forma de magnesio de última generación, destacada por su alta biodisponibilidad y excelente absorción intestinal, gracias a su unión con glicina. A diferencia de otras formas como el óxido o el sulfato de magnesio, no provoca efectos laxantes ni molestias gastrointestinales, siendo muy bien tolerado por el organismo.