Analizamos la influencia del islam en la última la exposición de Cartier en París
Hasta el próximo 20 de febrero de 2022, el Museo de Artes Decorativas de París (Musée des Arts Décoratifs) acoge la exposición ‘CARTIER y las artes del islam. En las fuentes de la modernidad’. En concreto, se trata de la colección de arte islámico de Louis Cartier, quien apasionado por la belleza de Oriente decidió recopilar piezas de arte excepcionales que hoy se exponen en la capital francesa.
Otro de los hitos clave en la historia de la firma y en cuanto a su relación con Oriente, son los viajes que el hermano del fundador, Jacques Cartier, realizó a la India y de donde trajo materias primas y piedras preciosas. Así, esta exposición explica de una forma simple a través de la historia real de la marca, cómo esta cuenta lleva impregnada desde el comienzo influencia islámica.
Una recopilación del fundador de libros de arte persa e indio de los siglos XVI y XVII y objetos preciosos con piedras incrustadas, fue la que inspira hasta día de hoy a los diseñadores de la Maison CARTIER. Fundada en 1847. Detalle que se podría analizar en las colecciones presentadas en sus tiendas o en su catálogo online.
Ahora, que todas las artes estás volviendo a sus orígenes, parece que la icónica marca de joyería también pretende revalorizar su génesis, una fuente inagotable de inspiración. Donde desde la joyería antigua muestran en esta exposición piezas verdaderamente únicas con la excepcional colaboración del Louvre.
Más de 500 piezas, entre las que podemos encontrar joyas, objetos, muestras del arte islámico, dibujos o libros además de objetos relevantes para la Maison son los protagonistas entre los que descubrir el interés por lo oriental.
La realidad de esta historia de la que emanó una sólida firma de joyería mundial es que Louis Cartier ansiaba encontrar una nueva inspiración. Y a principios del siglo XX la encontró; Cartier diseñaba sus propias joyas, sin dejar de revender antigüedades.
Así, entre las técnicas más empleadas en el arte islámico, encontramos joyas que parecen un mosaico de tradición bizantina, formas que nos recuerdan a esculturas en relieve, al estuco y al alicatado. Además de incluir vivos colores y formas. Otro de los elementos clave en la exposición de joyas son la composición de piedras preciosas que incluyen las joyas, basadas en la repetición de esquemas geométricos en serie, donde se combinan distintas decoraciones y simetrías para hacer de cualquier objeto, toda una obra de arte.
