La Clase E de Mercedes-Benz es una de las más antiguas del automóvil, una designación que se remonta a 1947, al inicio de las berlinas de lujo, sofisticadas y cómodas. A lo largo de los años se ha impuesto como el icono empresarial, el favorito de los ejecutivos, y todo a punta que así seguirá siendo con la nueva Clase E que acaba de presentar en sociedad. En palabras de los responsables, esta supone «un puente entre tradición y digitalización». Tal es así que esta vez ha apostado por la inteligencia artificial, por una mayor automatización y una aerodinámica sin precedentes.
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La Clase E ahora se presenta con una mayor distancia entre los ejes, lo que supone que hay más espacio en las plazas traseras. Lleva llantas de aleación de 21 pulgadas.
El frontal cuenta con un diseño más actual con faros LED y la parrilla ha sido rediseñada con un marco hexagonal.
Pantalla XL
En el interior, lo más destacado es la maxi pantalla MBUX. De tal manera que al sentarte al volante, los ojos se van al salpicadero donde se encuentra la enorme pantalla central y el cuadro de instrumentos.
La pantalla del conductor y la del copiloto son totalmente independientes, tal es así que esta última no se puede ver desde el lado del conductor para evitar distracciones, pero sobre todo para ofrecer mayor privacidad.
Ahora con inteligencia artificial
En cuanto a las nuevas prestaciones tecnológicas, Mercedes-Benz se adapta a las nuevas tendencias y ha colocado una cámara para hacer selfies y vídeos para poder publicarlas al instante en redes sociales. Por supuesto, la conectividad con el smartphone está más que asegurada.
Equipado con un nuevo sistema de iluminación ambiental que cambia al ritmo del sonido que sale a través de los 21 altavoces Burmester 4D.
La inteligencia artificial, además de detectar y aprender qué sistemas de confort utilizan los ocupantes del coche de manera habitual, ofrece programas especiales para reducir la sensación de estrés.
En cuanto a la asistencia al conductor, va equipado con un sistema mucho más avanzado que analiza el rostro de la persona que va al volante con el fin de detectar cualquier signo de cansancio, distracción o cualquier otro detalle que pueda ocasionar un accidente.
La nueva Clase E empezará a comercializarse a finales de este año y los responsables de Mercedes-Benz señalan que la mitad de los modelos serán híbridos enchufables.