El rey de Marruecos, dueño de una colección de coches de 5.000 millones: los más impresionantes
Marruecos es uno de los destinos que lleva varios años adquiriendo popularidad y muchos turistas españoles viajan a sus tierras para disfrutar de sus idílicos paisajes, su cultura gastronómica o alojarse en alguno de sus hoteles únicos. En los últimos tiempos está experimentando un crecimiento destacado, sobre todo en aeronáutica, electrónica o automoción, entre otras. Esta última lleva adquiriendo poder desde hace un tiempo, sobre todo porque su rey es un gran aficionado a los coches, especialmente si son de lujo. Nos adentramos en su garaje y descubrimos la colección de vehículos que posee el rey Mohamed VI.
Durante mucho tiempo hemos visto a varios royals con amplias colecciones de coches, pero no hay competición contra el monarca de Marruecos, puesto que ha acumulado tal cantidad de ellos (600 exactamente), los cuales tiene que resguardar en los garajes de doce palacios diferentes. De entre todos estos, hacemos una selección y estos son los más referentes:
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Laraki Sahara
Mohamed VI es uno de los monarcas más ricos del continente africano y su patrimonio dista mucho del de otros países. Los europeos siempre mantienen un perfil más bajo, pero a este no le asusta mostrar alguno de sus vehículos. El actual rey de Marruecos es una de las pocas personas del mundo que ha podido comprar el presente y exclusivo hiperdeportivo de 1.550 CV. Se trata de un modelo que está fabricado en Marruecos, a excepción del motor, que es importado y, por lo general, suelen ser propulsores V12 de Mercedes-Benz. El fabricante sólo hizo dos unidades, con un coste de unos dos millones de euros por cada una y el rey de Marruecos posee uno de estos exquisitos coches.
McLaren SLR
Su afición por los coches no nació de manera efímera, sino que fue su abuelo el que le inculcó la belleza de tan interesante universo. De este modelo sólo se fabricaron 2.157 unidades y se trata de un Mercedes-Benz SLR McLaren. El superdeportivo vio la luz en el año 2003 y, dos décadas más tarde, tanto su diseño como sus prestaciones siguen siendo impresionantes. Un modelo que ya no se fabrica, puesto que en el año 2000, la empresa alemana decidió suspender su producción. Los afortunados que cuentan con él en su colección pagaron en su día una media de 400.000 euros por él.
Aston Martin DB7
Este es un modelo habitual en las colecciones de coches más importantes del mundo, incluída la del rey de Marruecos. Su imagen se hizo popular gracias a los largometrajes de James Bond y, desde ese momento, los garajes más exclusivos del mundo cuentan con este ejemplar. Es uno de los deportivos más soñados por muchos que, en su variante más potente, monta un bloque V12 con casi 450 CV. Además, como curiosidad, cuando el rey marroquí le tiene que pasar la revisión, lo envía a Reino Unido en avión, expresamente para ello. Los modelos más antiguos, dependiendo si han sido adquiridos a particular o en subasta, pueden llegar a alcanzar los 100.000 euros.
Aston Martin Vanquish
De entre su amplia colección, vemos varios modelos de la casa británica aparcados en uno de los 12 palacios en los que los resguarda. Es un vehículo más actual que el anterior y, entre ambos dos, cuenta con algún que otro Aston Martin que nos permite hacer un repaso de la historia de la firma británica. Bajo sus entrañas esconde una gran potencia, equipado con un motor V12, aunque en este caso asciende a más de 800 CV. Su precio oscila entre los 300.000 euros, dependiendo de los extras que se le añadan.
Range Rover Sport Supercharged
Pensábamos que todo iba a ser deportivo, pero no. Mohamed VI, rey de Marruecos, también tiene varios coches 4×4 que usa para moverse en su día a día, perfecto para las tierras desérticas. Se caracteriza porque, fuera del asfalto, tiene unas propiedades mayores con respecto a los otros modelos y suele superar los 200.000 euros en el mercado, siempre dependiendo de los extras que se le quieran añadir.
Ferrari 250 GT Coupé Speciale
Es uno de los modelos que más ha dado que hablar y no sólo porque hace un par de años lo sacaron a subasta, sino porque cuando Sotheby’s los publicó, con el nombre del rey de Marruecos como propietario, se veía que necesitaba una exhaustiva restauración. Fabricado en 1956, el primer dueño de este Ferrari tan especial fue Mohammed al-Khamis bin Yusef bin Hassan al-Alawi, más conocido como Mohammed V, que fue rey de Marruecos. Este se vendió por casi dos millones de euros y se desveló que su estado era el actual por el daño que surgió en un huracán en 2004.
