Parece que decorar los hogares, sean apartamentos, chalets, mansiones o villas, con coches de superlujo, está de moda entre los millonarios… Aunque, ¿a quién no le gustaría ver aparcado en su salón coches tan maravillosos como un McLaren Senna? Y si no, que se lo pregunten a Adrian Portelli, el joven multimillonario que acaba de subir a una grúa un flamante y ostentoso McLaren Senna GTR con corazón V8 biturbo de 825 CV para colocarlo en su exclusivo ático en Melbourne, Australia, (recién estrenado por la friolera de 39 millones), nada más y nada menos que ubicado en la planta 57 de la torre ‘Sapphire by the Gardens’, para lo cual se tuvo de desmontar parte del edificio… Y te preguntarás ¿merecerá la pena y los millones invertidos? Descubrámoslo.
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La decoración sigue mil modas y tendencias, todas las cuales podemos asumir o en caso contrario imitar… Sin embargo, cada norma tiene su excepción, porque utilizar tu coche de superlujo como parte elemento de decoración de tu hogar… Permíteme que lo dude.
El que sí que puede permitírselo es Adrian Portelli, un conocido coleccionista millonario de coches y conocido en redes sociales por su afición por los deportivos de carreras.
Adrian ha apostado e invertido en tener la casa de sus sueños y en ella el salón de su casa estaba decorado con un superdeportivo de casi 2 millones de euros del que solo se han fabricado 75 unidades. Y como el dinero todo lo puede, su sueño se ha cumplido.
El australiano decidió subir en una grúa la friolera de 57 plantas (200 metros aproximadamente) para que su McLaren Senna GTR con corazón V8 biturbo de 825 CV, decorado con los míticos colores de Marlboro, decorase el salón de su ático en Melbourne.
El millonario comenzó la mudanza del McLaren Senna GTR a través de un ascensor, pero el tamaño del coche lo hizo imposible, por lo que decidió contratar a una empresa privada para ubicar el deportivo en la planta 57 de su ático. Una hazaña presenciada por miles de espectadores e incluso grabada en directo por la televisión australiana.
Para poder realizar el ascenso fue necesario desmontar parte del edificio, ventanas y vigas, además de contar con un equipo especial ya que cualquier ráfaga de viento podría haber arruinado la operación. Por suerte para todos, resulto ser todo un éxito.
Y ahora, el ostentoso e imponente McLaren Senna GTR preside y protagoniza el salón del ático del coleccionista de coches, convirtiéndose en una de las decoraciones más extravagantes y estridentes del planeta, (también una de las más tristes para el resto de los seres humanos, ya que no podremos volver a apreciar a este superdeportivo otra vez sobre el asfalto).
El coche no es matriculable y al tener especificaciones de carreras no es legal circular por carretera con él, fruto de algunos de sus componentes en chasis, cabina y sistema de impulsión, sencillamente radicales.
Hace unas semanas, Portelli ha mostrado cómo ha quedado el deportivo, repintado en colores oscuros que ligan a la perfección con la decoración del salón de su ático de lujo.
