Hay eras con inicios y finales. Ocurre en el mundo del motor, ocurre en todos partes. Y ocurre también con coches icónicos. Ocurre en muchas marcas, y en este caso, ocurre con Ferrari. Estamos hablando del modelo Ferrari F8 Tributo, uno de los superdeportivos más interesantes de la marca, que nos dice adiós después de solo tres años. Ya no solo es interesante por sus características, también porque la marca del Cavallino Rampante lo ha convertido, sin pretenderlo, en un coche de edición limitada.
Esta maniobra, esta decisión de Ferrari, es para darle prioridad a un nuevo modelo de la casa, el 296 GTB, con una filosofía más sostenible, siendo este el camino de Ferrari. La sostenibilidad como un gran valor de la marca. Pero volviendo al Ferrari F8 Tributo, ¿qué tiene de especial? Vamos a hablar de este coche.
Según los medios especializados, en Estados Unidos ya se están construyendo los últimos modelos. No se sabe quién lo ha comprado, como suele habitual, pero si tenemos algunos características interesantes. Según explican estos medios, es el último coche con dos puertas y techo cerrado, siguiendo el estilo deportivo. Tiene un motor de combustión de los de siempre, y según explican, alcanza los 100 kilómetros por hora en pocos menos de 3 segundos. Tiene siete marchas y alcanza una velocidad de 340 km/h. Pocos coches la alcanzan. Y tiene la cabina clásica de un Ferrari, perfecta para los amantes de estos coches.
«El Ferrari F8 Tributo es la nueva berlinetta biplaza con motor central-trasero, máximo exponente de este tipo de vehículo de la casa del Cavallino Rampante. Se trata de un coche con características únicas y, como su nombre indica, que homenajea al motor V8 Ferrari más potente de la historia» explican desde Ferrari. La mejor definición posible, ¿no?
Tiene un rendimiento aerodinámico que le hace ser un coche aun más especial. «El F8 Tributo integra la tecnología más avanzada, en términos de soluciones aerodinámicas, innovación y know-how de Ferrari, adquirida gracias a la participación en los campeonatos GT y Challenge, y la perfecciona para crear la berlinetta de serie con motor central-trasero con el más alto nivel de prestaciones accesibles para cualquier tipo de conductor», defienden desde la casa italiana.
«Este coche es el último vástago de una larga y noble estirpe de berlinettas» dicen desde Ferrari. Una estirpe que empezó en 1975, que acaba ahora en 2023 con este modelo pero que seguirá. Como suele ocurrir. Siempre evolucionando hacia delante.
