El pueblo construido dentro de un cráter con casas hechas de diamantes
Nördlingen es la típica ciudad alemana sacada de un cuento. Pintorescos techos rojizos y fachadas cuidadas, encerrada dentro de una gran muralla y construida sobre el cráter de un meteorito caído sobre esa zona hace millones de años. Sólo falta el ogro y la princesa para que sea una película de Disney. Pero lejos de la ficción, Nördlingen existe de verdad. Se sitúa en la región alemana de Baviera (en el sur del país, aunque por encima de Múnich) en una zona que fue escenario de cruentas batallas en la antigüedad.
Entrar en Nördlingen es como vivir una aventura medieval. La ciudad y su arquitectura te cautivan según llegas. Las casas permanecen intactas desde el siglo XIV, y se conservan en perfecto estado, y las fachadas de las viviendas son de estilo Renacentista. ¿Quieres conocer este pequeño pueblo de 20.000 habitantes con COOL? Viaja con nosotros hasta Nördlingen.
Desde el inicio, se pensó que Nördlingen se había levantado sobre el cráter de un volcán inactivo. Sin embargo, con el paso del tiempo, investigadores de Estados Unidos descubrieron que el cráter se había formado en realidad por la caída de un meteorito hace millones de años. El impacto fue sobre un depósito de grafito, que debido a la presión, el golpe y la temperatura, se rompió en diminutos diamantes. Al desconocer que la piedra que había en el suelo, llamada suevita, estaba salpicada de diamantes, los edificios locales fueron construidos casi completamente con ella, haciendo de Nördlingen un pueblo sin igual. De este modo, todas las casas de Nördlingen están construidas con diamantes. No obstante, estos son tan diminutos, que se convierten en prácticamente invisibles para el ojo humano.
La suevita puede encontrarse en otras partes del mundo donde se produjeron impactos similares, pero en ningún lado la concentración de gemas es comparable con la de Nördlingen.
El meteorito, de 1 kilómetro de ancho, viajó a una velocidad de unos 25 kilómetros por segundo, golpeando con tal fuerza el suelo que creó el cráter de 26 kilómetros de diámetro donde hoy se asienta la ciudad. ¿Verdad que te han entrado ganas de conocerlo?