Viajes

Madeira, la joya verde del Atlántico

Madeira / Foto: Unsplash

Madeira un destino algo desconocido para la mayoría. Lo tenemos cerca, pero es necesario hacer escala en Lisboa si queremos volar desde España. En poco tiempo, podemos pasar de estar en uno de los picos más altos de la isla a darnos un chapuzón en el mar, siempre rodeados de paisajes naturales absolutamente increíbles. La naturaleza de Madeira es mágica. Despierta todos los sentidos a través de sus múltiples tonalidades verdes, el agua dulce que fluye en las levadas, el olor a flores y la tierra húmeda.

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La naturaleza de la isla incluye el Bosque Laurisilva, Patrimonio Natural de la Humanidad (UNESCO), flores y pájaros inusuales, acantilados y senderos interminables, poios (campos madeirenses) agrícolas y picos envueltos en nubes, donde se puede practicar senderismo, correr y hacer deportes extremos.

Existen bahías y penínsulas serenas, islotes e islas desiertas que protegen a los lobos marinos, reservas naturales con cascadas, parques y jardines de flores. Madeira representa la verdadera sintonía con la naturaleza, presente en toda la isla.

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Porto Santo

Porto Santo es un destino conocido por sus playas de arena dorada. La isla de Madeira es famosa por sus piscinas naturales de origen volcánico y playas de guijarros (grava volcánica) y arena negra. Pero también hay algunas playas de arena amarilla importada, y varios balnearios con piscinas y acceso directo al mar.

Playa de Porto Santo / Foto: Unsplash

La isla de Porto Santo, por todas sus características y cualidades terapéuticas, es el destino ideal para unas vacaciones diferentes y tranquilas, donde relajarte mientras cuidas tu salud. Aquí, tanto el agua de mar como las arenas cálidas de la playa son los ingredientes principales de las terapias disponibles en los spas de la isla.

Playa de Porto Santo / Foto: Unsplash

 

Casas de Santana

Las Casas de Santana son una de las imágenes icónicas de Madeira, muy buscadas por los turistas debido a su peculiaridad. Son casas de madera con techo triangular, de paja (material utilizado para la impermeabilización) y de pequeñas dimensiones (alrededor de 4 metros de ancho por 7 metros de largo).

Casas de Santana / Foto: Unsplash

En el pasado, era común encontrar estas casas hechas con materiales naturales en áreas rurales. Hoy en día, permanecen en lugares restringidos en el municipio de Santana, en memoria del patrimonio local.

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Piscinas naturales de Porto Moniz

Piscinas naturales / Foto: Unsplash

Una de las imágenes más emblemáticas de la isla de Madeira es la de las piscinas naturales. Se componen de rocas volcánicas, donde el mar entra naturalmente formando charcos de agua salada. Los efectos naturales de las olas contra las rocas son un espectáculo digno de ver, y en los días en que el mar está en calma, las piscinas se convierten en verdaderos lagos que nos brindan la sensación de nadar en el mar, en una piscina natural.

Foto: Unsplash

 

Funchal

Funchal / Foto: Pexels

Funchal, la capital del archipiélago de Madeira, es el punto más urbano de estas islas. Repleto de historia, cultura y entretenimiento constituye el centro turístico más grande de la región. Es una ciudad encantadora, en forma de anfiteatro, que se abre sobre una hermosa bahía, donde se encuentran el club náutico y el puerto.

Funchal / Foto: Unsplash