• Lifestyle
  • COOL People
  • Relojes & Joyas
  • Arquitectura
  • Motor
  • Wellness
  • Cultura
  • OKDIARIO

‘El Jardín del Convento’: descubrimos los mejores dulces de España hechos por monjas de clausura

Isabel Ottino
Foto: Isabel Ottino
  • Ana Fariña
  • Ejerzo el periodismo con honestidad desde hace más de 30 años y con la misma ilusión del primer día.
    • Actualizado:

En la parte trasera del convento del Corpus Christi del siglo XVII, en el centro histórico de Madrid, nació hace doce años El Jardín del Convento. Una boutique de dulces elaborados por monjas de clausura con mucho mimo y una excelente materia prima, que nunca cambia. Sabrosos dulces llegados de todos los rincones de España gracias al empeño y tesón de su creadora.

«Viajo por toda España en busca de lo mejor de cada lugar. Lo más difícil es convencer a las monjas para que me dejen vender sus productos», explica Isabel Ottino a COOL, la fundadora de El Jardín del Convento y periodista de profesión.

@eljardindelconvento
Foto: @eljardindelconvento

Dulces de convento, mermeladas, magdalenas, chocolates, trufas… Son  algunos de los deliciosos productos que se pueden encontrar sólo en este lugar, situado en la calle Cordón 1 de Madrid.

Foto: @eljardindelconvento
Foto: @eljardindelconvento

«La esencia es volver a los sabores del pasado, huir de lo industrial y volver a los sabores de la infancia, a las recetas sencillas y riquísimas».

@eljardindelconvento
Foto: @eljardindelconvento

Por ejemplo, los huesos de Fray Escobas que son mini bocados con sabor a anís, hechos con la masa de una rosquilla tradicional, pero en trocitos pequeños, o las almendras garrapiñadas de Cigales, que son únicas por su delicada capa de azúcar, y por utilizar solamente almendra largueta.

Foto: @eljardindelconvento
Foto: @eljardindelconvento

Recetas todas que tratan de recuperar el gusto de lo hecho con calma, sosiego y mucho amor. Además, los ingredientes son totalmente naturales, sin aditivos artificiales.

El Jardín del Convento
Foto: @eljardindelconvento

Las yemas del convento de la Purísima Concepción de Siruela, en Badajoz, fueron el primer descubrimiento de Isabel. «Probamos muchas y muy buenas de otros lugares, pero éstas eran –sin duda- las más suaves, las más deliciosas y las únicas que se deshacían en la boca», recuerda Isabel.

@eljardindelconvento
Foto: @eljardindelconvento

Y de las Hermanas Clarisas de Belorado, Burgos, El Jardín del Convento tiene los best seller: trufas y palitos de naranja hechos con la mejor naranja y el mejor chocolate. Sólo utilizan chocolate Valrhona.

@eljardindelconvento
@eljardindelconvento

«Son de las mejores trufas que hay en España y los palitos, inigualables» y además las hermanas están asesoradas por el pastelero Paco Torreblanca.

@eljardindelconvento
Foto: @eljardindelconvento

«Nuestras existencias se actualizan cada semana, cada domingo se hacen los encargos; porque las monjas sólo trabajan bajo pedido, y no manejan grandes stocks«.

@eljardindelconvento
Foto: @eljardindelconvento

«De esta manera nos aseguramos de que en nuestra tienda siempre encuentres productos frescos, recién elaborados». Por ejemplo, las mermeladas que son de Santa María de Huerta, en Soria, están hechas con una amplia variedad de sabores tradicionales y sus arriesgadas mezclas. Y sólo utilizan fruta y azúcar en su elaboración, sin ningún espesante o conservante.

Jardín del Convento
Foto: @eljardindelconvento

Aunque El Jardín del Convento dispone un gran selección de dulces que se han convertido en los ‘indispensables’ de sus fieles clientes, Isabel sigue, sin tregua, a la búsqueda de nuevos sabores. «Las magdalenas se agotan y el mazapán de Las Clarisas de Badajoz, utiliza la almendra y no el azúcar como primer ingrediente».

Jardín del Convento
Foto: @eljardindelconvento

«Yo sigo viajando y visitando conventos, de manera anónima. Estoy siempre atenta y hago catas del producto en mi casa con mi familia y amigos para testar el dulce, y si pasa el filtro, se incorpora a la tienda». «Ahora, muy pronto, tendré lo más nuevo, que son unos hojaldres buenísimos llegados desde Cantabria».

@eljardindelconvento
Foto: @eljardindelconvento

«Recuerdo que a los pocos meses de abrir la tienda, entró una vez una mujer de incógnito -que finalmente resultó ser la madre superiora de un convento- que venía a conocer dónde se vendía su producto. Para ellas es fundamental saber quién, cómo y en qué lugar se vende».

@eljardindelconvento
Foto: @eljardindelconvento

«Ahora, con el paso de los años, ya tengo una amistad muy bonita con muchas de las hermanas. ‘Si te va bien a ti nos va bien a nosotras’, me dicen a menudo».

@eljardindelconvento
Foto: @eljardindelconvento

«En  muchos de los pueblos estos dulces hechos a mano por las monjas no se valoran mucho; al contrario, los habitantes locales prefieren lo industrial, porque apenas lo conocen. Los ingresos de El Jardín del Convento, son el 85 por ciento de la facturación anual de algunos de los conventos con los que colaboro. El mérito es suyo, no mío, sin duda. Yo, lo que hago es que les asesoro algunas veces; les digo que las cajas tengan ventana para que se vea  bien el producto, por ejemplo o que hagan medios kilos en lugar de un kilo, que se venden mejor».

@eljardindelconvento
Foto: @eljardindelconvento

Velas, lo más nuevo 

La novedad recién llegada a El Jardín del Convento son las velas  sostenibles y ecológicas, con olores tan apetecibles como los irresistibles dulces.»Los aromas son otra de mis pasiones. Son de cera vegetal 100%, sin toxicidad».

jardín convento
Foto: @eljardindelconvento

«Son todas velas vegetales, sin parafina, explica Isabel. Con los mismos olores que tú pondrías en tu casa». Hechas en España, en Valencia.

@eljardindelconvento
Foto: @eljardindelconvento

La tienda es preciosa; con pocos, pero grandes muebles. Con un mostrador de farmacia provenzal del siglo XIX y mucho interiorismo de aire francés comprado en anticuarios, Isabel consigue el efecto deseado... Que parezca que estaba así amueblada desde siempre. «Me gusta la idea de que el cliente que nos visite, se pasee por la tienda, y disfrute tanto con los aromas como con los sabores. Que sienta tranquilidad y calma. Y agradecemos cada venta y cada comentario bonito de la tienda, que está abierta con mucha ilusión, y continuamos dando las gracias porque aquí seguimos.»