No atiende a cifras. Se mueve por el sentimiento y habla de un tipo distinto de amor. Vinculada a la música desde los cuatro años, Valeria Castro, canaria de raíz y alma, cautivó al mismísmo Alejandro Sanz hace ya tres primaveras. ¡Y no nos extraña! Hablar con ella es sumergirse en un mar en calma. ¡Ya no digamos escucharla cantar! La artista se dio a conocer hace cinco años a través de las redes sociales y de su canal personal en YouTube versionando canciones de los grandes del pop español. Warner Music no quiso dejarla escapar e impulsó su talento en la línea de lo que Valeria ya hacía. Única en esencia acaba de sacar sus primeros temas propios. Los compone ella misma y todos, todos, nos erizan la piel. Valeria huye de los temas mundanos, de la banalidad, de las frases hechas y de lo comercial. Cautiva desde una pureza que ya se nos hace extraña. Una serenidad que pudimos palpar desde el instante mismo en que entró por la puerta de nuestro plató.
Valeria Castro se presenta en el estudio con un minivestido blanco camisero de escote en pico y manga larga con aberturas. Lo combina con zapatillas. Lleva unos llamativos pendientes que recuerdan a las conchas del mar y el pelo liso con las puntas onduladas cayendo sobre su espalda. Nos saluda con la timidez que de cuando en cuando, no nos vamos a engañar, se echa de menos en un artista. Y tenemos con ella una fluida conversación a través de la que nos revela, entre otras cosas, que su madre es la productora del primer videoclip que grabó en tiempos de COVID en su isla natal, La Palma.
Valeria vive ahora en Madrid y reconoce que echa de menos el mar. Pero está contenta e ilusionada y así nos lo transmite aunque a sus palabras preceda el brillo de sus ojos. «Tenía ganas de moverme y hacer cosas» nos dice. «He hecho entrevistas online estos meses pero no es lo mismo», reconoce. Nos cuenta que el día 26 de junio actuará en Madrid y se sonroja cuando le preguntamos qué se siente al saber que mucha gente logra con su música parar en medio de este caos. «Es una gran responsabilidad», confirma desde la modestia más auténtica. Entonces nos dice que no sabe cuántos seguidores tiene. «No lo tengo muy presente, a mi me basta cuando una sola persona me dice que le gusta lo que hago».
Te invitamos a darle al play para ver la entrevista completa. Pero ten claro que, aunque hemos intentado sacar a la luz el alma de Valeria, lo que veas en el vídeo es algo así como echar un vistacín por la mirilla. Porque el trasfondo de Valeria, como persona y artista, daría para hablar con ella durante días.
