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María Bartivas revela cómo crear en casa un ritual digno de un ‘hammam’: «Con brumas estimulantes»

(Foto: COOL the Lifesyle)

Con la llegada de agosto, el ritmo se ralentiza y la casa de verano se convierte en ese refugio de calma donde cuerpo y mente reclaman un merecido respiro. ¿Y si este año la transformas en tu propio santuario de bienestar? Desde baños de sales minerales y masajes faciales con piedras frías hasta rituales sensoriales con aceites esenciales, hablamos con una experta en baños árabes para que nos de las claves de cómo convertir nuestra casa en un auténtico hammam. Porque el lujo, en vacaciones, también está en lo simple: cuidarse por dentro y por fuera.

«El ritual comienza bebiendo agua o té frío como ‘rooibos’ con naranja y exponerse al sol lo justo»

Comenzamos esta travesía sensorial con María Bartivas, directora de experiencia de Hammam Al Ándalus, un referente en la fusión entre tradición ancestral y bienestar contemporáneo, y que acaba de abrir un nuevo espacio en Puerta de Hierro, en Madrid. Ella lo tiene claro: el ritual de belleza ideal para el verano comienza por dentro. «Ante todo, beber agua o té frío como rooibos con naranja y exponerse al sol lo justo», aconseja. A esto le suma un cuidado diario y consciente, que incluya automasajes con un buen aceite corporal y un aceite facial renovador como su Óleo Elixir, además de una exfoliación suave semanal con crema de jabón negro y el tradicional guante Kessa.

(Foto: Pexels)

«En verano recomiendo usar brumas, como una de menta para los momentos más caluroso»

Pero si hay algo que define el enfoque de Hammam Al Ándalus es el cuidado sensorial: «Aunque no asociemos las sensaciones olfativas con la belleza, el cerebro sí lo hace». Por eso, recomienda incorporar un ritual olfativo diario con las brumas estimulantes: menta en los momentos más calurosos, azahar para la siesta y lavanda antes de dormir. «Es una forma sencilla de regalarse un extra de frescor, alegría y relax».

«El aceite de oliva virgen extra y sus derivados son esenciales por su poder antioxidante e hidratante»

Para la piel expuesta al sol, Bartivas apuesta por ingredientes naturales con alto poder regenerador. «El aceite de oliva virgen extra y sus derivados, como el extracto de hoja de olivo o el hidroxitirosol, son esenciales por su poder antioxidante e hidratante», explica. Junto a estos, destaca el aceite de Rosa de Damasco, el ácido hialurónico, la vitamina C y el menos conocido pero potente aceite de semilla de Espuma de prado, que fortalece la función barrera y mejora la microbiota cutánea.

Aceites esenciales. (Foto: Hammam Al Ándalus)

Esta filosofía conecta directamente con el concepto slow beauty, que en Hammam se vive como una auténtica «belleza consciente». «Partimos de los rituales que se practican en nuestros baños árabes, donde la atención plena, la sensorialidad y la conexión con uno mismo son clave. Nuestra cosmética se formula en laboratorios locales, usando ingredientes de proximidad como el AOVE andaluz», señala Bartivas.

Y es que en verano, más que nunca, el bienestar se cuela por los sentidos. «La belleza no puede disociarse del bienestar, y el bienestar lo gestionamos a través del cerebro, que recibe la información de nuestras sensaciones», concluye. Por eso, elegir una textura suave, un aroma reconfortante o un gesto pausado puede marcar la diferencia entre una rutina y un verdadero ritual de cuidado.

(Foto: Hammam Al Ándalus)

«El bronceado excesivo sigue siendo uno de los peores hábitos, así como evitar la exfoliación para ‘no perder’ el color»

Eso sí, también advierte de los errores más comunes: «El bronceado excesivo sigue siendo uno de los peores hábitos, así como evitar la exfoliación para no perder el color». En su lugar, propone protección solar constante, exfoliaciones semanales, una limpieza profunda nocturna y el uso de productos reparadores como el contorno de ojos Rosa Eterna, ideal para mantener la mirada hidratada y fresca incluso en los días más calurosos.