No cabe duda de que David Beckham es el mejor espejo en el que mirarse cuando de lo que se trata es de ser un hombre moderno y elegante. El exfutbolista ha llegado a ser Embajador del British Fashion Council, y su elegancia y distinción lo han convertido en uno de los hombres mejor vestidos del mundo.
Sabe cómo combinar a la perfección sus ojos claros, su tez y sus múltiples tatuajes con su figura varonil y aniñada a un tiempo. El exfutbolista ha abrazado siempre las tendencias con esmero. Esta vez, ha vuelto a poner de moda la camisa favorita de los 80 de Wall Street.
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Uno de los motivos principales por el que el inglés es un gran referente de nuestro tiempo es que sabe perfectamente cómo amoldar las tendencias a su estilo personal, adaptándolas a su edad y su momento profesional. No solo sabe comportarse a la perfección de acuerdo al entorno en el que se encuentra sino que también sabe adaptar su estilo a cualquier acto público, pero siempre destacando entre los demás.
Cada una de sus apariciones públicas no solo supone un acontecimiento, sino una nueva referencia de estilo. Sus camisas, trajes, zapatos, relojes y demás prendas y complementos son analizados al milímetro. Está claro que su relación de más de veinte años con la diseñadora y ex Spice Girl Victoria Beckham le ha ayudado a estar en el ojo público con las mejores tendencias, seamos honestos.
Siendo Beckham uno de los hombres más aclamados en cuanto a estilismo, muchos hombres suelen fijarse en sus looks. Hoy en COOL te contamos todo sobre la camisa favorita de los 80 de Wall Street que Beckham ha vuelto a poner de moda: la camisa de cuello con contraste.
Camisa de cuello con contraste
Camisa de rayas horizontales con cuello blanco
Camisa de rayas verticales con cuello blanco
Camisa azul con cuello blanco
La camisa favorita de los 80 de Wall Street
En los años 80, la clase social con éxito eran los yuppies: ejecutivos financieros que llegaban a lo más alto de las empresas financieras moviendo grandes cantidades de dinero en la bolsa. Trabajaban horas y horas y su única meta era el capital y el éxito.
Solían exhibir su fortuna con trajes hechos a medida de corte perfecto, con chaleco y corbata, pelo engominado, camisa de rayas, maletín y zapatos de cordones. La camisa por excelencia de moda en esta época era aquella con contraste en el cuello. Es decir, era muy común entre los grandes ejecutivos lucir una camisa azul o a rayas con cuello blanco. Así vestía Michael Douglas en la película Wall Street.
