¿Qué tienen en común un perro con tres patas, una niña de rizos rojos y una de las voces más dulces de la música española? La respuesta es un viaje lleno de imaginación, aventuras y canciones que nos recuerdan que siempre hay millones de posibilidades. Este cuento ilustrado de Amparo Fontanet con banda sonora creada por Conchita promete ser el regalo perfecto para sorprender a los más pequeños de la casa este 25 de noviembre. Hablamos con la cantante sobre este proyecto, la maternidad, la música…
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Conchita, conocida por sus letras emotivas y melodías cuidadas, descubrió a los entrañables personajes de Olivia, una niña de rizos rojos, y Felipe, un perrito de tres patas con mucho carácter, a través de los bocetos de Fontanet. «Para mí fue inevitable componer la música que ahora acompaña las historias de Olivia y Trespatas«, confiesa la artista.
El proceso creativo fue un viaje lleno de diversión. Inspirada por su hijo de seis años, Conchita creó canciones que mezclan caos, imaginación y ternura.
«Quería que las canciones fueran pegadizas y que enseñaran algo sin que casi te des cuenta», explica. El resultado es una banda sonora que se disfruta tanto con el cuento como de forma independiente, ofreciendo un complemento perfecto para las aventuras de los protagonistas.
Pregunta: ¿Qué fue lo que más te atrajo de los personajes de Olivia y Trespatas para decidir unirte a este proyecto?
Respuesta: Conocí a Amparo Fontanet hace unos años y me contó que tenía en mente hacer un cuento pero que no encontraba el momento. Yo llevaba tiempo pensando en que debería hacer algunas canciones para niños porque tengo un público de 30 para arriba y de 10 para abajo… es maravilloso.
Después de darle muchas vueltas pensamos que sería bonito hacer un cuento acompañado de canciones.
P: ¿Cómo fue el proceso de crear la banda sonora para una historia infantil? ¿En qué te inspiraste?
R: Ha sido relativamente fácil para mí. Tengo un niño de seis años así que estoy muy metida en su universo de niño pequeño lleno de colores, imaginación, caos, diversión y locura. He intentado mezclar un poco todos esos componentes, que sean canciones divertidas, un poco caóticas algunas, pegadizas, que te apetezca escuchar una y otra vez pero que también te enseñen algo sin que casi te des cuenta…
P: ¿Qué fue lo más desafiante de fusionar música y literatura en este formato?
Es algo que nunca había hecho pero que me ha salido muy natural. Sabiendo más o menos de lo que quería hablar en cada canción (que eso era fácil teniendo un cuento en el que basarse), he intentado que puedas escuchar las canciones y tengan sentido sin leer el cuento, y si te has leído el cuento que sea divertido escucharlas porque te da más información sobre los personajes. Además, puedes imaginar mucho mejor por qué cantan lo que cantan.
P: ¿Cómo ha influido tu trayectoria como cantautora en este nuevo reto de componer para un público infantil?
R: Supongo que cuando ya has hecho tantas canciones y hablado de tantas cosas diferentes, escribir sobre cosas que controlas y que no te duelen es mucho más fácil. Ha sido muy divertido y diferente al proceso de hacer una canción para un adulto, para mí. Normalmente hablo sobre cosas que me remueven. En este caso ha sido como volver a tener cinco, seis, siete años y recordar todas esas cosas que me divertían cuando era pequeña…
P: Tu último álbum, La bola de nieve, ha tenido gran acogida. ¿Qué conexión encuentras entre este trabajo y tus canciones para Trespatas y Olivia?
R: Sigue siendo música, música muy cuidada. Siento que muchas veces en la música infantil se descuidan mucho los arreglos y la música en sí.
La bola de nieves es otro mundo, es el mío, ahora que tengo un niño chiquitito me doy cuenta de que ellos viven en un mundo muy diferente al nuestro, no sé en qué momento pasamos del uno al otro, supongo que en la adolescencia y por eso es tan complicada. El mundo infantil está repleto de juegos, todo es un juego, todo es un motivo para poder saltar, correr, dar una voltereta o imaginarte que estás en cualquier lugar menos en el que estás…
Yo había olvidado un poco todo esto, pero la verdad es que es mucho más divertido no tomárselo todo tan en serio. Por eso me lo he pasado muy bien haciendo estas canciones. Metiendo gritos, acelerando alguna canción hasta no poder más y haciendo cosas que tal vez en un disco para adultos no haría, pero siempre cuidando mucho los arreglos y el sonido.
P: Tu canción El Viaje recibió Disco de Oro. ¿Cómo ha sido la evolución de tu estilo musical desde entonces?
R: Voy contando y cantando las cosas según me van pasando. Supongo que antes tenía el foco más puesto en el amor y el desamor y ahora lo alterno con otras cosas que me preocupan o que no había sentido antes. Es más una cuestión de crecimiento personal que de música, pero luego la música tiene que reflejar todo esto claro. Está pasando porque me estoy haciendo mayor… y quiero ser honesta y contar las cosas que me pasan.
P: Este libro combina música, ilustraciones e historias. ¿Qué crees que aporta esta combinación al público infantil?
R: El cuento que ha escrito Amparo Fontanet te enseña muchas cosas como que, a veces, cuando algo se pone feo, antes de agobiarte, es mejor frenar un poco, respirar y buscar soluciones. También te enseña que si las cosas no te salen bien es porque igual necesitan otro enfoque, nada más. Enseña el valor de la amistad.
Nosotros, los adultos, también tenemos que recordar que tenemos que parar, respirar, y llenarnos de posibilidades como dice Trespatas. Criar a un niño es dificilísimo, seguramente lo más difícil que hayas hecho en tu vida si tienes hijos, y creo que todo lo que pueda acompañar ese camino, ya sea un cuento, un libro, una película, una charla… bienvenido sea.
P: Después de esta experiencia, ¿te interesaría seguir explorando el ámbito infantil en otros proyectos?
R: La idea es continuar con este proyecto con más historias de Trespatas. Ojalá vaya muy bien y podamos hacer pronto el siguiente.