Andrea Guerra (Prada), sobre la compra de Versace: «Llegaremos a los 7.000 millones de ingresos»
La reciente compra de Versace por parte del grupo Prada, operación valorada en 1.250 millones de euros y que se hará efectiva el próximo 2 de diciembre, representa un movimiento estratégico de gran envergadura. Según explicó al medio italiano Repubblica Andrea Guerra, consejero delegado del grupo, esta adquisición no solo refuerza el portafolio de marcas de Prada, sino que también abre una nueva etapa de crecimiento a largo plazo, ofreciendo oportunidades para innovar y expandirse en mercados clave.
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Guerra subraya que Versace es «una marca única y extraordinaria», pero también «profundamente complementaria» a Prada y Miu Miu desde el punto de vista estético y cultural.
«La compra de Versace fue una oportunidad…también en términos de precio»
En su opinión, la firma fundada por Gianni Versace comparte con el grupo un arraigo en la historia clásica del Mediterráneo y una visión creativa que nace de la cultura. Por eso, asegura, la compra llegó en el momento perfecto: «Fue una oportunidad. Nos sentíamos preparados y aprovechamos este escenario, también en términos de precio».
«No esperamos un retorno rápido, sino construir valor en los próximos años»
Lejos de buscar resultados inmediatos, el consejero delegado insiste en que la incorporación de Versace es una apuesta de fondo: un proyecto que requerirá tiempo, inversión y un reposicionamiento cuidadoso. «Somos plenamente conscientes de que se trata de un compromiso fuerte. No esperamos un retorno rápido, sino construir valor en los próximos años», afirma. Y añade que, si la estrategia se consolida, el grupo tiene capacidad para alcanzar los 7.000 millones de euros de ingresos, un objetivo que marcaría un salto histórico para la compañía.
Parte del desafío será mantener vivo el legado de Gianni Versace sin caer en la nostalgia. Guerra lo define como una «tensión positiva» entre creatividad e historia, un proceso que deberá responder a cómo debe ser la marca en 2027, 2030 o incluso 2040. Para ello, Lorenzo Bertelli asumirá la presidencia ejecutiva de Versace, aunque Miuccia Prada no intervendrá en la dirección creativa.
Con la llegada de Versace, el grupo suma un tercer motor a los buenos resultados de Prada y Miu Miu, que llevan veinte trimestres consecutivos al alza. Una integración que, según Guerra, forma parte de una evolución natural de la empresa fundada por los Bertelli-Prada, hoy en pleno proceso de transición generacional.