Tras su visita a España para promocionar Griselda, la serie que está triunfando en Netflix, Sofía Vergara regresó a Los Ángeles para ultimar los detalles de la reforma de su casa, la misma en la que vivió con Joe Manganiello durante siete años. La mansión se encuentra en una exclusiva zona residencial de Beverly Park, sobre un terreno de 1.600 metros cuadrados. En un reciente estudio, este exclusivo barrio cuenta con el número más alto de multimillonarios en la ciudad de Los Ángeles y, según la propia actriz colombiana, la vivienda está valorada en 24 millones de euros. Te mostramos dónde vive la intérprete.
Puede que Beverly Park no sea tan conocido como el de Beverly Hills, pues este último su fama se lo debe a series de los años 90, como Sensación de vivir. Sin embargo es en Beverly Park donde se encuentran las casas más millonarias. Un total de 80 mansiones con un valor medio de 23.436 € el metro cuadrado, muy superior al precio por metro cuadrado de Beverly Hills, Bel Air o Sunset Strip (estas están a 19.088 € el m2).
Antes de la reforma, Vergara quiso deshacerse de la casa y la puso a la venta, pero se lo pensó mejor y decidió reformarla. Para ello contó con el savoir faire de la diseñadora de interiores Ohara Davies-Gaetano y su mayor reto fue transformar una estructura clásica de los 90 a las nuevas tendencias.
La cocina, su rincón favorito
El corazón de la casa es la cocina pues, aunque la actriz confiesa que ella no cocina, le encanta hacer vida allí. Cuenta con electrodomésticos Viking y una zona de comedor. Otro de los espacios más valorados por la actriz es la bodega y zona de ocio pues allí, como ella dice, «es donde reside la felicidad».
El salón es de estilo clásico, presenta amplios ventanales que unen visualmente interior y exterior, y dispone de una gran chimenea. Tanto aquí, como en el resto de la casa, la decoración es totalmente funcional pues la actriz no quería que «los muebles fueran tan valiosos que la gente tuviera miedo de usarlos».
El dormitorio principal, también en tonos neutros, está presidida por una chimenea de estilo Luis XVI, procedente del hotel Waldorf-Astoria de Nueva York.
Tonos neutros y muebles funcionales
Sofía quería que la casa fuera totalmente monocromática en tonos neutros; sin embargo, la interiorista la animó a introducir ciertos puntos de color gracias a la naturaleza que asoma por las ventanas y las obras de arte que descansan en las paredes. En la decoración tampoco faltan piezas antiguas y vintage.
Toques tropicales
La zona del jardín es obra de Stephen Block, de Inner Gradens. Añadió nuevas plantas, sobre todo tropicales en honor a las raíces de su propietaria. También colocaron fuentes de manera estratégica para darle un toque más fresco y añadieron bancos y macetas de estilo clásico.
