Así decoraban nuestras abuelas sus casas… y ahora Kendall Jenner lo ha convertido en tendencia
Kendall Jenner es una de las modelos mejor pagadas del mundo y una de las miembros del clan Kardashian. La hemos visto crecer y cambiar de casa frente a las cámaras del reality familiar, pero esta vez el acceso ha sido distinto: una entrevista reciente nos ha permitido descubrir su refugio más personal. ¿El resultado? Sólo podemos adelantar una cosa: no éramos de que el grandma (abuela) chic era todo lo que necesitábamos en casa hasta ahora.
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Por mucho tiempo, el gran reality de las Kardashian nos abrieron las puertas a las viviendas familiares de este clan, pero siempre han sabido cómo guardar un as bajo la manga para mantenernos con la intriga de sus segundas viviendas. Quizá por eso cuando Kendall Jenner enseñó su casa de montaña a la revista AD, la revolución surgió de forma casi instantánea, a la par que el flechazo.
Y antes de seguir, decir que el estilo grandma chic hace referencia a un estilo estético y de moda que reinterpreta la forma de vestir tradicional de las abuelas, pero desde una mirada contemporánea, irónica y sofisticada.
Dice en su entrevista con la publicación que todo comenzó con el deseo de tener una segunda vivienda rural donde poder retirarse los veranos o los fines de semana. Entonces llegó la oportunidad perfecta en una propiedad abandonada situada en un punto sin desvelar de Wyoming.
Una apuesta decorativa por lo vintage
A través de su estilo, Kendall Jenner nos habla de su pasión por la estética vintage y entre sus grandes pasiones no ha dudado en señalar que los caballos y el interiorismo son dos conceptos que bien podrían liderar el ranking. Teniendo esto como base, entendemos por qué su hogar de la montaña es una ramificación arquitectónica de su personalidad. Sin falta de detalle, dejando entre la decoración y los espacios la simbiosis perfecta entre color, nostalgia y sofisticación.
Lo sorprendente es que gran parte del encanto de este hogar se debe a las redes sociales. Jenner contó que la base de la inspiración de su nuevo hogar partió de una carpeta de imágenes de inspiración bien nutrida y una buena indagación en Pinterest. Pero el flechazo profesional apareció en Instagram, donde la modelo se topó con la persona que acompañaría y firmaría el interiorismo de su nuevo hogar.
En este caso, la persona sobre la que recae el reconocimiento de este idílico proyecto campestre es la interiorista Heidi Caillier, toda una celebridad de internet afincada en Seattle cuyo estilo mezcla lo atemporal con lo orgánico. ¿El resultado? Un portfolio de proyectos que desvelan un gusto indiscutible e impregnan los hogares de ese equilibrio entre la elegancia, lo hogareño y ese aura de saber que la decoración y el buen estar nunca pasan de moda.
Lo propio que caracteriza al estilo grandma chic que viste cada uno de sus proyectos y donde lo vintage se ve envuelto en una paleta donde todo guarda relación, nada despunta y los estampados vintage tienen cierto protagonismo.
Con nostalgia e historia
Uno de los puntos más sorprendentes de este proyecto se encuentra en una de las habitaciones reservadas para invitados. No es una habitación al uso, de hecho, este espacio se encuentra construido en un Airstream Bambi 2020 vintage que Jenner recibió por uno de sus cumpleaños.
Creado para quienes se incorporan al viaje a última hora, subrayaba durante la entrevista, este espacio recrea un refugio alpino con revestimientos de madera, toques lima en las encimeras y la iluminación y un detalle sorprendente. Hablamos de la pequeña bañera de zinc que se encuentra en uno de los rincones de este espacio.
Vuelta a los revestimientos
Otra de las claves de este interiorismo reside en la búsqueda de texturas en las paredes, diseñadas con el fin de crear personalidad dentro del espacio. Utilizando este recurso podemos ver como los paneles de madera o lacados se abren paso en las diferentes estancias. Dejando, eso sí, que el papel de pared tome cierto protagonismo en una de las habitaciones de invitados, esta vez sí, situadas en el interior de la casa.Según afirma en la entrevista, la idea era crear una base potente donde el resto de los elementos conviven sin perjudicarse entre ellos. Y así lo ha conseguido, dando forma a un espacio donde las mantas de inspiración irlandesa y los elementos vintage conviven a la perfección en una misma atmósfera.
Los baños de ensueño
Si tuviésemos que quedarnos con un espacio donde los detalles son verdaderamente auténticos sería sin duda los baños. Aquí cada pequeña manecilla, cada tono y cada elemento funcional se convierte en una pieza casi expositiva. El mobiliario casi roza el minimalismo, pero la estética que defiende, las líneas vintage de cada elemento y el hecho de que cada pieza ocupe el lugar para el que parece estar predestinado de forma genuina dan un sentido y una coherencia explícita a este proyecto.
Aquí debemos resaltar el uso de las baldosas. Bien como base del suelo, como ocurre en el baño destinado a una de las habitaciones de invitados. O bien como mosaico para envolver la zona de la ducha del baño principal. Guarda cierto encanto, además, porque este surge como una cápsula que contrasta con la pureza laminada del baño en tono burdeos.
El salón se lleva el premio
Pero de entre todos los elementos que encontramos en este hogar, el salón es sin duda el que más ha llamado la atención. Sobre todo por el «riesgo» de su elemento central: el sofá. Hablamos de riesgo porque no cualquiera se atrevería a resolver con tal desparpajo una apuesta por un estampado tan vintage como es el Hollyhock Handblock de Lee Jofa. Aquí vemos mucho de abuela y mucho de chic.
Esta pieza central es la que actúa a modo divisorio entre el salón y la gran cocina abierta, otro de los imprescindibles a tener en cuenta en nuestra wish list de interiorismo. Sobre todo por la gran isla central que protagoniza este espacio y por la luz cenital de este área, que otorga cierto aura al que ya es considerado como el corazón de la casa.