Hay momentos de nuestra vida en los que debemos tomar decisiones importantes y, a veces, también complicadas que pueden marcar nuestro futuro más inmediato o el de nuestros seres queridos.

Una de estas decisiones es, sin duda, la de sopesar dejar nuestro hogar y mudarnos a una residencia para estar 100 % atendidos y acompañados, o trasladar a uno de nuestros familiares para que puedan contar con los cuidados necesarios que, en algunas ocasiones, en nuestras casas no podemos proporcionarles.

Sin embargo, el concepto de residencia ha cambiado mucho en los últimos años y actualmente existen centros en España que ofrecen servicios personalizados según las necesidades de cada usuario, con un ambiente más familiar, que ayudan a disipar las dudas y a dar el paso, como es el caso de CleceVitam.

En esta red de residencias, los usuarios pueden decorar sus habitaciones con objetos personales e incluso llevar sus propios muebles para sentirse como en casa. Además, los residentes cuentan con servicios sociosanitarios que cubren todas sus necesidades, tanto para personas dependientes como no dependientes, y con un entorno adaptado y un personal especializado que les aporta apoyo integral en todo momento.

Gloria Fernández tiene a su madre en la residencia CleceVitam Bastiagueiro, situada en A Coruña. Según explica en el siguiente vídeo, encontró en este centro todo lo que buscaba: “Es un lugar luminoso, amplio, con decoración alegre y con unas personas absolutamente encantadoras que estaban dispuestas a hacer todo lo que estaba en su mano para que mi madre estuviera cuidada y bien”.

 

Este cuidado personalizado que caracteriza a los centros CleceVitam está basado en el modelo de Atención Integral Centrada en la Persona (AICP), que ha adquirido mucho peso en los últimos años sobre todo a la hora de llevar a cabo el proceso de adaptación de los residentes al día a día de la residencia, teniendo en cuenta el pasado y presente de los usuarios, así como sus gustos y aficiones, para que se sientan cómodos en el centro.

Unidades de convivencia que impulsan la socialización

La distribución de las estancias de las residencias CleceVitam en unidades de convivencia permite a los mayores crear grupos de confianza e impulsa la socialización entre compañeros, algo que les ayuda a tener una convivencia feliz, tal como explica Amparo Fernández, usuaria de CleceVitam Bastiagueiro.

Otro de los aspectos que caracteriza a las residencias CleceVitam es la integración de herramientas tecnológicas de vanguardia en el día a día del usuario, que permiten ofrecer a los mayores una atención más eficiente e individualizada.

Entre las citadas herramientas, por ejemplo, destacan las videoconferencias con los familiares o personas allegadas a través de dispositivos adaptados que eliminan cualquier barrera de accesibilidad a la tecnología; la posibilidad de conexión con servicios de telemedicina para realizar consultas sanitarias en remoto, así como la digitalización del proceso de toma de constantes vitales con equipos que transmiten los datos automáticamente al historial de cada persona, sensores de calidad del aire que envían alertas cuando es preciso ventilar cada espacio y juegos digitales y otras actividades de estimulación cognitiva desde tabletas gigantes interactivas.

Heidi Valdivia, enfermera de la residencia CleceVitam Bastiagueiro, es una de las profesionales sanitarias que ponen todos sus esfuerzos en conocer y escuchar a los usuarios para que estén a gusto. “Mi trabajo es atender, cuidar a los usuarios, prestar una labor asistencial y rehabilitadora, prevenir y curar. El trato con los residentes es (y debe ser) un trato directo, es una atención centrada en la persona. Es decir, los atendemos según sus necesidades, lo que ellos necesiten”, explica Heidi.