La innovación tecnológica, hoy en día, está integrada en la mayoría de los ámbitos de nuestra sociedad. Los avances más vanguardistas tienen la capacidad de poder aplicarse en casi todos los escenarios posibles, incluidos aquellos destinados a la estimulación y mejora cognitiva de las personas de edad avanzada. En CleceVitam, la red de residencias para mayores de Clece, son conscientes de los beneficios de la innovación tecnológica y tienen a disposición de sus residentes y sus profesionales diversas herramientas destinadas a fomentar un envejecimiento activo, llevar un seguimiento médico de su salud detallado y digitalizado, así como a mejorar la eficiencia de sus espacios.

Una tablet de grandes dimensiones donde entrenar el cerebro divirtiéndose, un aparato de hidromasaje donde relajarse al máximo o un sistema de microchips en la ropa de los usuarios para realizar un seguimiento de la misma son algunas de las herramientas con las que cuentan los profesionales de CleceVitam Vía Ronda (Santa Cruz de Tenerife) y CleceVitam Ponent (Lérida).

Una tablet para la estimulación cognitiva

Uno de los instrumentos tecnológicos estrella es la Yetitablet. «Se trata de una tablet de grandes dimensiones para hacer –principalmente– estimulación cognitiva. A través de esta herramienta se facilita la intervención desde el punto de vista psicológico, gracias a los llamativos colores de la pantalla, y al ser táctil, además, es útil para los residentes, sobre todo para aquellos que tienen una menor agilidad en las manos o problemas de visión», explica Verónica Pérez, directora de CleceVitam Vía Ronda.

Por su parte, Laia Valverde, educadora social de CleceVitam Ponent, asegura que la Yetitablet es también un dispositivo que facilita su trabajo: «Nos ha hecho ahorrar mucho tiempo a la hora de preparar el material con el que trabajar con los usuarios. Ahora, por ejemplo, no tenemos que construir los juegos, como Pasapalabra, que es el que más les gusta como estimulación cognitiva, y podemos estar más tiempo con ellos, que es de lo que se trata».

Sobre lo que supone esta tablet, Pérez asegura sentirse muy «satisfecha» porque «lo ven como un juego y se entretienen mucho». «Debemos tener en cuenta que la mayoría de las personas mayores no han usado nunca la tecnología y el tocar la pantalla, los colores, la música, etc., les fascina», añade.

Digitalización y consulta de datos en línea

Otro de los elementos tecnológicos con los que cuentan en CleceVitam es el monitor portátil Edam. «Se trata de tecnología aplicada a la telemedicina que, además, usamos a diario porque tiene la capacidad de tener un registro muy completo de todas las constantes, la tensión o la temperatura de los usuarios», explica la directora de CleceVitam Vía Ronda.

Tras la recogida de todos los datos, estos se vuelcan en un sistema software. «Siempre los tenemos disponibles para consultarlos y ver la evolución de los usuarios, si hubiera que hacer consultas. Es de gran ayuda, sobre todo cuando alguna de las personas que viven aquí está más delicada de salud», añade.

Nuka: la mascota con IA que mejora síntomas neuropsiquiátricos

En CleceVitam Ponent también han integrado una terapia no farmacológica mediante el uso de robots. Se trata de la foca Nuka, que ya se ha convertido en la mascota de todos los usuarios, como comenta Valverde: «Es un robot en forma de bebé foca, dotado con inteligencia artificial, que hace movimientos suaves que denotan cariño y afecto. Despierta bienestar y tranquilidad entre los residentes, la cuidan mucho».

Begoña García, usuaria de este centro desde hace unos meses, asegura que Nuka le encanta: «Es preciosa y la hemos bautizado como Blanquita y es nuestra mascota. A mí me gustan mucho los animales, me recuerda a cuando tenía mis gatos y mis perros, me trae recuerdos muy agradables».

El objetivo de la foca Nuka, añade la educadora social, es mejorar síntomas neuropsiquiátricos como la agitación, la ansiedad y estimular el lenguaje y la sociabilidad: «Hay personas que no hablan mucho, que tienen mayores problemas a la hora de expresarse, y cuando ven a la foca les sale decirle algo». Y no sólo eso, Valverde afirma que «se ha probado de forma científica que las terapias con Nuka tienen la capacidad de aumentar la autoestima de las personas mayores al ver que todos pueden hacer lo mismo. Se ven reflejados los unos en los otros».

Estimulación multisensorial

La residencia CleceVitam Ponent, además, ha incorporado en sus instalaciones la sala Snoezelen, un espacio interactivo diseñado para estimular los sentidos. «Se trata de un lugar muy vivo donde se recrean atmósferas que estimulan las capacidades cognitivas y el bienestar emocional de los usuarios. Lo usamos, sobre todo, con personas que tienen un deterioro cognitivo o demencia, aunque también con residentes sin ningún deterioro cognitivo que quieren pasar un rato relajados», añade Valverde.

«La sala puede ambientarse con iluminación de diferentes colores y con música que podemos poner con la Yetitablet. Ellos eligen qué tono quieren y lo que quieren escuchar. Las canciones siempre se adaptan a sus gustos porque tienen mucho poder en la estimulación de recuerdos», termina.

García, que acompaña a Valverde durante toda la conversación, asegura que así es, que la música ha formado parte de la vida de todo el mundo. «Yo tocaba el piano y siempre he escuchado muchísima música clásica. El compositor que más me gusta es Beethoven y algunas cosas de los Strauss», comenta sonriente. «A nosotros lo que más nos gusta es la alegría y reírnos, tengo más de 80 años, pero me quedan muchas cosas por hacer», termina.

Una cabina muy especial para una relajación máxima

Por su parte, Valverde destaca el uso de la cabina terapéutica llamada Lucía, un espacio con efecto hidromasaje con agua pulverizada que ayuda en las rutinas de higiene de los usuarios, y que contribuye a su relajación mental: «Esta cabina permite poner aromas diferentes, según lo que necesite cada persona. Por ejemplo, si tienen problemas de bronquios podemos poner eucalipto. Los olores llegan al cerebro y estimulan diferentes áreas. Es como un spa, les dan un baño con jabón y, como profesional, les aportas un masaje. De allí salen como nuevos. Está todo muy adaptado y muy bien pensado».

También cabe la posibilidad, cuentan desde CleceVitam, de conectar la cabina Lucía con algunos elementos de la sala Snoezelen. «Hay una barra de burbujas con agua de colores que pueden acariciar, poner música mientras se bañan –todos eligen el sonido del mar, destaca Valverde– y estar 20 minutos muy relajados».

Sostenibilidad, digitalización y eficiencia

Ambas residencias CleceVitam cuentan con la certificación BREEAM, la cual acredita que sus edificios son sostenibles desde el punto de vista energético y que, además, aplican nuevas tecnologías en el día a día de sus instalaciones, permitiendo la automatización de sus sistemas.

CleceVitam Ponent cuenta con un sistema de control de accesos inteligente, que proporciona a cada usuario una pulsera para abrir o cerrar su habitación. En cada dormitorio, además, hay tablets integradas que permiten a los trabajadores registrar sus tareas de forma digital. Ambos centros cuentan también con un sistema de microchips en la ropa de los usuarios, gracias a los cuales se puede saber a quién pertenece, el número de lavados que tiene la prenda y evitar, de este modo, el etiquetado de toda la ropa de forma manual.

Pérez asegura que la aplicación de la tecnología en el sector de los cuidados ha sido un salto cualitativo muy importante: «Nos ha facilitado mucho el trabajo a todos, no sólo para fomentar el envejecimiento activo, sino también en cuanto al seguimiento en detalle de la salud de los usuarios, como es el caso del monitor portátil Edam para medir las constantes vitales, o tener una mayor eficiencia en cualquier actividad. La tecnología hoy en día es fundamental para todo, hay que renovarse porque es muy beneficiosa para residentes y profesionales».