No hay nada más divertido que conocer una región a través de sus vinos. Ni tampoco hay nada más fantástico que brindar por la improvisación, por un nuevo trabajo, por un cumpleaños, por el nacimiento de un bebé o por el regreso de un amigo que vivía fuera. En España, como en otras culturas mediterráneas, nos encanta celebrar lo acontecido –o lo que está por acontecer– alrededor de una mesa repleta de viandas y regadas con buenos caldos.

A todo ello, además, debemos unir un fenómeno que se ha producido, sobre todo en los últimos años, y ha sido la apuesta férrea de los consumidores por los productos locales y, desde luego, los vinos no han sido una excepción. Cada día más personas buscan tomar vinos de la tierra que pisan, experimentar el sabor de la uva autóctona y, por supuesto, conocer la historia que acompaña a cada una de las botellas que se saborean.

De alguna manera, necesitamos conocer para amar y, por ello, algunos de los planazos más ‘top’ de la Comunidad de Madrid pasan por conocer las zonas vinícolas de la región y los vinos que producen, ya que cada uno de los puntos de la región tiene una variedad de uva diferente, un ‘saber hacer’ peculiar y, por ende, unos resultados también muy diversos.

Unos vinos únicos y muy especiales, según los expertos, que para muchos madrileños –y no madrileños– aún son grandes desconocidos. Por ello, proponemos varios lugares de la región de Madrid para conocer los vinos de la tierra y los mejores planes para maridarlos, conocerlos, apreciarlos y, en definitiva, amarlos y añadirlos a nuestras mesas.

Un espacio íntimo y agradable a sólo 15 minutos del centro de Madrid

En primer lugar, proponemos salir del centro de la capital y sentirnos acogidos por la calidez y la hospitalidad de Pilar Oltra, sommelier y CEO de Vinology, que ha lanzado el proyecto ‘La Parra’, un espacio en Pozuelo de Alarcón donde hace catas explicadas y detalladas para conocer los riquísimos vinos de Madrid y todos los secretos de su uva.

Oltra, que lleva toda la vida entre viñedos, ya que su padre y su abuelo son enólogos, ha convertido su casa particular en un lugar de encuentro para los amantes del vino. Tiene, además, una amplia experiencia con los Vinos de Madrid, ya que ha trabajado durante años en una bodega exportadora de la región, y eso lo percibe el visitante nada más llegar y escuchar la pasión que pone en el relato de los caldos madrileños bajo una parra centenaria.

“Es una de las más antiguas de Madrid, por eso le puse al proyecto: ‘La Parra’. Tiene 110 años y me pareció un lugar maravilloso para acoger a la gente y hacer que disfruten del vino”, comenta.

Patio de ‘La Parra’. @LaParra

Oltra, además, lleva gran parte de su vida haciendo encuentros relacionados con el vino a través de Vinology. “Diseñamos el evento de principio a fin, se trata de una cata cerrada para un mínimo de ocho personas y de forma exclusiva, no mezclo grupos. Pueden elegir la temática o la zona de los vinos que quieren tomar, así como los platos que los acompañarán”, explica.

Con respecto a los Vinos de Madrid, señala que tenemos “unos vinos maravillosos a los que tengo muchísimo cariño por lo que me ha unido a ellos, así como por la evolución tan positiva y revolucionaria que han tenido en los últimos años. Son francamente maravillosos y, de verdad, no tienen nada que envidiar a otras Denominaciones de Origen (D.O.) y debemos estar orgullosos”.

'La Parra'. @P.I.
‘La Parra’. @P.I.

Y termina: “Los que estamos en Madrid deberíamos beber y pedir más vinos locales. De este modo, los restaurantes y los lugares donde tomar un vino comenzarán a elevar la presencia de los vinos madrileños en sus cartas. Debemos apostar por los vinos locales y darles una oportunidad porque, además, nuestra gastronomía los acoge de forma magistral. ¡Viva Madrid!”.

Buenísimos vinos, buenísimos platos

Otro de los lugares donde poder tomar buenísimos Vinos de Madrid es ‘La Montería’, una de las tabernas más conocidas del barrio de Retiro regentado por Miguel Ángel Román, un hostelero de toda la vida que ha robado el corazón a toda la capital con su atención de primera y sus platos elaborados con productos de alta calidad. Hace algunos meses, además, y para dar aún un servicio más completo, han hecho una remodelación para ampliar el comedor y la barra para brindar más espacio a los clientes.

Román, que habla de los Vinos de Madrid con especial cariño, detalla que ha apostado por los caldos de la región desde que comenzara la andadura de la Denominación de Origen (D.O.) Vinos de Madrid en los años 90: “Desde ese momento quise defender lo que hacemos en nuestra tierra, por ello, comenzamos a incorporar los vinos de Madrid a nuestra carta”.

Subraya, además, que con el tiempo han surgido más bodegueros que hacen unos vinos “estupendos” y que, además, “están cuidando mucho” la viticultura de Madrid. El modo de selección de los vinos para la carta es, sobre todo, a base de cata. “Por la cercanía, vienen a vernos los bodegueros, nos traen muestras de vinos y en base a ello hacemos la selección final. Intentamos, eso sí, que sean vinos diferentes entre sí y buscando las cualidades de cada uno de ellos”.

Referencias Vinos de Mardid en 'La Montería'. @RT
Vinos de Madrid en ‘La Montería’. @RT

En ‘La Montería’ se pueden tomar varias referencias de Vinos de Madrid para acompañar los platos que llegan a la mesa. “Tenemos, por ejemplo, ‘Las Moradas’ de San Martín de Valdeiglesias, un vino de variedad garnacha de terreno granítico que está, de verdad, francamente rico. Y también, de Las Moradas, tenemos el Albillo Real, un blanco muy interesante elaborado con una uva que está casi en extinción”, añade. Además, de la misma zona, Román destaca el vino Peña Caballera de la Bodega Marañones que “es un grandísimo vino, desde luego, un vino de altura con viñas que tienen más de 70 y de 80 años”.

Entre otras referencias, también tienen El Rincón, que es de Aldea del Fresno y pertenece a la familia del Marqués de Griñón. Es un gran vino con un coupeage de tempranillo y syrah. El Licinia, que es de la zona de Morata de Tajuña y tiene el coupeage de tempranillo, garnacha, merlot y syrah, es también un vino de Madrid muy bueno que, además, tiene muy buenas críticas y calificaciones en las guías de vinos”.

Detalle de la botella de Las Moradas en ‘La Montería’. @RT

Con respecto a la variedad de los vinos, Román explica que “todo va en gustos”, aunque, al menos de momento, en la D.O. Vinos de Madrid “los tintos son los que más se piden y consumen, a los blancos aún les queda un poco más de recorrido”. Sobre la apuesta de los comensales por los vinos locales, el empresario relata que “hay personas que son muy clásicas a las que, digamos, no puedes sacar de las marcas más tradicionales o de los vinos que toman normalmente, pero también hay gente a la que le encanta probar vinos nuevos y, la verdad, cuando conocen los Vinos de Madrid se llevan una grata sorpresa”.

Otra de las cosas sobre las que pone el foco Román es en la apuesta ecológica de algunos bodegueros como, por ejemplo, Alfredo Maestro en la zona de Navalcarnero. “Está haciendo un vino que se llama ‘A Dos tiempos’ porque la vendimia la hacen en dos momentos diferentes de maduración. Apenas hace intervención en el suelo, en la viña y, por lo tanto, hay muy pocos sulfurosos. Razón por la que este vino se podría calificar casi casi de natural, así que va a sentar mejor, no va a dar dolor de cabeza y, además, tiene mucha fruta”, comenta.

Referencias de Vinos de Madrid en 'La Montería'. @RT
Referencias de Vinos de Madrid en ‘La Montería’. @RT

En ‘La Montería’ se puede pedir consejo vinícola a Román, que siempre está en la sala, para poder elegir el vino que mejor se adapta a los platos que comáis. “Por ejemplo, si vais a tomar unas gambas a la gabardina invertidas o un langostino a media plancha recomiendo un Albillo Real, creo que le iría fenomenal. Y si se toma, por ejemplo, algún tipo de arroz como risotto podéis tomar El Rincón que le iría muy bien. Y si elegimos carne roja o algunos platos de caza como el corzo o la perdiz recomiendo que se tome un Licinia”, concluye.

Los Vinos de Madrid, aliados ideales de los quesos artesanos

El vino y el queso, un tándem ganador que jamás falla. Sentados en una mesa al aire libre o en una barra de una taberna castiza con una buena copa de vino de Madrid, un plato de queso artesano de oveja y de vaca junto con un buen pan es un plan de diez. Se trata, además, de dos productos que se acompañan, se complementan. Son, sencillamente, la pareja de baile perfecta para disfrutar de un buen rato.

En Quesería Cultivo –Quesos con Rostro–, que tienen sus propios obradores artesanos (Félix Iniesta, Granja Cantagrullas y La Cuerre) donde transforman la leche cruda de oveja y de vaca en grandes referencias queseras, poseen varios Vinos de Madrid que podemos comprar en las diversas tiendas que tienen en varios puntos de la capital. Todas las referencias, según detallan, poseen D.O. Vinos de Madrid y van y vienen de diversas bodegas según el momento del año y, por supuesto, de las ventas.

Vinos de Madrid en la Quesería Cultivo. @RT

Gabriel, que atiende a todos sus clientes de la calle Cavanilles, a sólo siete minutos a pie de Atocha, en esta ocasión ha elegido dos vinos: Agrícola de Cadalso y El Hombre Bala, ambos proceden de las faldas de la Sierra de Gredos y tienen una forma de elaboración peculiar.

“El primer vino, Agrícola de Cadalso, que es muy especial, está elaborado con uva garnacha y está fermentado en depósito de cemento y sin barrica. Se trata de un vino con bastante cuerpo y acidez, así como con unas notas un poco minerales”, detalla.

Queso sobre tabla de Quesería Cultivo. @QC

Con respecto a El Hombre Bala, con una etiqueta bastante divertida, desde Quesería Cultivo explican que se trata de “un vino con un poco más de fermentación que el anterior, se fermenta durante alrededor de 14 meses en barrica de roble francés en el sureste de Madrid bajo la falda de la Sierra de Gredos”. Ambos vinos, concluye, “son ecológicos y bionaturales con poca intervención, es decir, se trabaja en su mayoría con fermentos propios”.

Detalle del vino Agrícola de Cadalso. @RT

Con respecto a los quesos con los que podemos acompañar estos dos vinos, Gabriel aconseja que se mariden con pastas blandas –como panzaburro o grama–, quesos curados y semicurados. “El sabor salado de los quesos, sobre todo de estos últimos, avivan los sabores de fruta negra y roja de los vinos. De este modo, conseguimos que se perciban mucho más los sabores”, subraya. Concretamente, explican desde Quesería Cultivo, “el queso humo es ideal, una variedad que esta ahumada con madera de haya que se elabora en nuestra quesería de Valladolid”.

Más información: www.turismomadrid.es