En decenas de ocasiones se escucha a los estudiantes Erasmus, el programa de movilidad que permite a los universitarios europeos estudiar un año fuera de su país, que el estudiar en el extranjero, fuera de casa y fuera de la zona de confort, debería ser una actividad obligatoria para todos. Tras finalizar el año de estudios, la mayor parte de ellos siente que ha crecido como persona, que ha adquirido conocimientos que no tenían y que, además, conocían nuevas culturas y maneras de vivir de países desconocidos. En definitiva, un año inolvidable donde millones de estudiantes universitarios forjarán amistades para toda la vida, amores que puede que acaben o no y una mente más abierta que será fundamental para su desarrollo como personas y futuros profesionales.
En el caso de España, se trata de un país en el que los estudiantes están plenamente interesados en vivir la experiencia Erasmus y las cifras así lo avalan. Durante el año académico 2016/2017, los últimos datos disponibles del informe Erasmus+ de la Comisión Europea (CE), un total de 40.079 estudiantes universitarios españoles se beneficiaron de una beca Erasmus para estudiar o hacer prácticas laborales en el exterior durante el curso académico 2016/2017, frente a los 39.223 de un año antes.
De este modo, según los datos, España es el tercer país –después de Francia y Alemania– del Viejo Continente que más alumnos mandó fuera a estudiar y el primer país de Europa como receptor con un total de 47.138 personas por delante de Alemania y Reino Unido. Las universidades que más alumnos enviaron fueron la Universidad de Granada, la Universidad de Valencia y la Universidad Complutense de Madrid. Mientras que los destinos favoritos para estudiar de los españoles son Italia, Reino Unido, Alemania y Francia.
Se trata de unas cifras positivas para el sistema educativo europeo, por ello, la Comisión Europea va a destinar 30.000 millones de euros para el programa Erasmus entre 2021 y 2027 con el fin de duplicar el número de jóvenes que se benefician de estas becas de movilidad, es decir, elevar la cifra del 3,7% al 7,5%. Una partida para becas Erasmus que, sin embargo, no siempre es suficiente para sufragar todos los gastos que deben sufragarse al estudiar fuera: transporte, vivienda o residencia, gastos del día a día, comedores, etc.
Desde la Coordinadora de Representantes de Estudiantes de Universidades Públicas (CREUP) y Erasmus Student Network España (ESN) señalan, a través de un informe publicado hace unos días sobre la cofinanciación nacional y autonómica de Erasmus+, que es necesario que haya un aumento de la cofinanciación nacional –y paridad entre las distintas comunidades autónomas– que complemente la partida de la CE para maximizar el alcance y la inclusión de las movilidades porque las barreras financieras constituyen uno de los principales obstáculos para los estudiantes. Además, añade el mismo informe, el programa Erasmus sigue teniendo una participación mayoritaria de estudiantes que proceden de entornos socioeconómicos elevados que ponen barreras a una sociedad absolutamente equitativa.
En nuestro país, además de las becas procedentes del Ministerio de Educación con partidas presupuestarias de las arcas públicas nacionales y europeas, hay programas de becas que elevan las cuantías oficiales de los Presupuestos del Gobierno y la CE.
Este es el caso de Banco Santander que suscribió con CREU un acuerdo para impulsar las Becas Santander Erasmus en su segunda edición –en la primera edición este programa recibió más de 27.000 solicitudes– con el fin de promover la igualdad de oportunidades, la inclusión y reconocer la excelencia académica de los estudiantes.
Las Becas Santander Erasmus contarán con una financiación de cerca de dos millones de euros para la concesión de más de 5.100 becas y ayudas de 3.200, 500 y 150 euros a jóvenes que quieran cursar sus estudios en un centro educativo de la Unión Europea (UE) y realizar prácticas profesionales internacionales. Los jóvenes que quieran optar a una Beca Santander Erasmus, pueden realizar su inscripción a www.becas-santander.com hasta el 16 de marzo de 2020.
Almudena Álvarez, estudiante de Sociología en Francia que disfruta de una Beca Santander Erasmus, valora de manera muy positiva que haya una alianza entre los programas de becas del Ministerio de Educación y Banco Santander porque “la vida en París es bastante cara, la verdad”. Aunque señala, eso sí, que la experiencia está siendo muy ”fructífera e inolvidable” porque en la residencia de estudiantes en la que está “imparten muchas charlas sobre política o ecología de personalidades muy importantes del país”. A pesar de ello, concluye, “estoy ya instalada y muy contenta, haciendo un montón de actividades culturales porque aquí hay una gran comunidad cultural universitaria que estoy aprovechando a tope”.
Álvarez llegó en agosto a la capital francesa, allí se instaló unas semanas antes de comenzar el curso para poder “familiarizarse” con el entorno francés. “A principio estás muy desorientada, ya no había visitado el barrio en el que vivo y, además, en Madrid no cogía el metro para ir a la universidad”. Y añade: “Siempre he sido muy abierta, pero ahora estás fuera de tu zona de confort. No echo de menos mi casa, aunque hay cosas que me chocan los franceses son peculiares y los parisinos más”.
20.000 Becas Santander en España y más de 73.000 en todo el mundo
Las más de 5.100 becas que se concederán a través de Santander Erasmus, forman parte de las 20.000 becas y ayudas que la entidad concederá en España durante el curso académica 2019/2020 a través de Santander Universidades y en colaboración con las universidades públicas y privadas y otras instituciones del país.
Concretamente, concederá más de 13.500 becas de estudios para grado o posgrado, acceso a la universidad, investigación o movilidad internacional; más de 4.500 para fomentar la empleabilidad de los estudiantes de cara a su entrada en el mercado laboral y más de 2.000 para apoyar e impulsar el emprendimiento universitario.
A nivel global, Banco Santander concedió más de 73.000 becas y ayudas al estudio el pasado año en los distintos países en los que opera, con una financiación de 121 millones de euros.
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