Cuando dos enseñas de gran potencia se unen son invencibles. Pero, además, si detrás de esa fusión hay un propósito de compartir valores para tener un impacto positivo en la sociedad y el mundo, ya estamos hablando de una pareja de baile perfecta. Y este es, precisamente, el caso de Banco Santander y la Fórmula 1. Ambas comparten unos valores comunes dentro de su estrategia, como son la innovación, la sostenibilidad y el trabajo en equipo, con los que trabajan juntos para impulsar aspectos tan importantes como la movilidad más eficiente dentro de los grandes premios y un mayor desarrollo tecnológico, a la vez que juntos impulsan el disfrute y la emoción de la Fórmula 1.

Más que un deporte: un fenómeno global

El rugido de un motor. Una curva tomada al límite. El vértigo de una salida desde la pole. Pero también un plano de cámara perfectamente encuadrado, una grúa elevando el coche ficticio del equipo APXGP en mitad de un paddock real, y un piloto de carne y hueso saludando a Brad Pitt como si compartieran garaje. Bienvenidos al nuevo universo de la Fórmula 1. Como decíamos, un espectáculo global que acelera hacia el futuro y en el que Banco Santander pisa fuerte.

La Fórmula 1 ha vivido en los últimos años una transformación radical. Bajo el control de Liberty Media y con Stefano Domenicali como CEO de la competición, ha dejado de ser solo un deporte para convertirse en un fenómeno cultural. Más abierto, más joven, más diverso. Cada día más presente en cines y redes sociales, y espacio de espléndidas experiencias. En definitiva, un espectáculo total que se vive tanto en la pista como en el sofá o en el smartphone.

Y en todo ese recorrido, Banco Santander lleva casi dos décadas brindando su apoyo.

Dos décadas de apoyo y una nueva etapa

Banco Santander ha estado ahí, curva tras curva, desde hace casi dos décadas. En 2025, además, ha arrancado una nueva etapa: el banco es desde este año patrocinador oficial de la F1 y también del histórico equipo Williams Racing.

Una doble alianza que va mucho más allá del logo en un monoplaza y con la que la compañía apuesta por comunicar valores, conectar con clientes y reforzar su marca en mercados clave como EEUU, Brasil, México, Reino Unido o España.

De Ferrari a Williams: una historia de pasión por la F1

La historia de Banco Santander con la F1 comienza en 2006. Desde entonces, ha patrocinado Grandes Premios, escuderías legendarias como McLaren o Ferrari, e incluso pilotos icónicos como Fernando Alonso, Lewis Hamilton o Carlos Sainz. Pero 2025 representa un nuevo capítulo.

El acuerdo con Williams Racing –uno de los equipos más históricos de la parrilla– permite al banco mostrar su logotipo en el coche, los cascos y los uniformes, además de participar en campañas digitales, eventos exclusivos y experiencias únicas para clientes. En EEUU, donde la F1 ha ganado una tracción espectacular, será la marca Openbank la que tomará protagonismo en el monoplaza. Un importante paso estratégico en un mercado donde la F1 vive un auténtico boom.

Hollywood entra en boxes (y Santander también)

Ahora esta alianza entre Banco Santander y la Fórmula 1 da un paso más. Hace solo unos días se ha estrenado una de las películas más esperadas del año: la superproducción sobre Fórmula 1 protagonizada por Brad Pitt y producida por Apple Studios. Pero esta, tengamos en cuenta, no es una película cualquiera, ya que está rodada en Grandes Premios reales, con escuderías, ingenieros y pilotos auténticos, y en la que se puede ver la marca Banco Santander en los boxes y en el cartel oficial.

Por tanto, podemos afirmar que, lejos de ser una simple aparición promocional, esta película y todo el marketing promocional en torno a ella refleja la evolución del deporte. Tras el éxito de la aclamada serie de Netflix Drive to survive, llega ahora el salto a la gran pantalla. Pero la cinta no es solo cine: es una pieza más en la narrativa global de la F1 como fenómeno cultural. Y estar ahí es una forma de apoyar su proyección, su crecimiento y su capacidad de emocionar a nuevas audiencias.

Valores compartidos: sostenibilidad, innovación, excelencia

Porque no se trata solo de visibilidad, se trata también de asociarse con un deporte que representa como ningún otro sus valores: innovación, sostenibilidad, excelencia y transformación.

La F1 es hoy un laboratorio de tecnología puntera, donde se prueban soluciones que luego pueden aplicarse a la automoción, la energía o la eficiencia operativa. Es también una competición que se compromete con la sostenibilidad, con un ambicioso objetivo de cero emisiones netas en 2030. Y es, sobre todo, un espectáculo que exige lo mejor de cada equipo, cada profesional, cada detalle, etc.

Valores que encajan a la perfección con el propósito del banco y con su estrategia de crecimiento sostenible. Lo explicaba recientemente Ana Botín, presidenta de Banco Santander: «Durante casi dos décadas, desde que Banesto comenzó a trabajar con la F1, la fortaleza y el alcance global de este deporte han ayudado a Banco Santander a conectar con sus clientes, profundizar en sus relaciones y fortalecer nuestra marca. Esta colaboración marca un nuevo e importante capítulo en nuestra relación en un momento en el que seguimos transformando y haciendo crecer nuestro negocio».

Visibilidad global, presencia local

La audiencia acumulada de la F1 en 2023 superó los 1.350 millones de personas. Y el 60% de esa audiencia se concentra en los mercados principales de Santander. La presencia del banco en la Fórmula 1 no solo refuerza su posicionamiento global, sino que se traduce en una conexión emocional en cada país donde opera.

Los tres Grandes Premios en suelo estadounidense –Miami, Austin y Las Vegas– son auténticos espectáculos de masas. Allí, Openbank tiene una oportunidad excepcional de darse a conocer entre nuevos públicos, especialmente entre los más jóvenes. En Europa y Latinoamérica, circuitos icónicos como Silverstone, Monza o Interlagos ofrecen también escenarios privilegiados para estar presente allí donde se genera atención, pasión e influencia.

Una historia que sigue escribiéndose… a toda velocidad

Con la vista puesta en el futuro, Banco Santander acelera en su camino de transformación, crecimiento e impacto global. La alianza con la Fórmula 1 no es un simple patrocinio: es una apuesta estratégica. Una forma de estar donde están los clientes y de ofrecerles experiencias únicas en torno a la competición. De conectar con nuevas generaciones y acercarse a las personas a través de una pasión compartida. Porque en la F1 y en la banca, lo que cuenta no es solo cruzar la meta. Es cómo se corre cada vuelta. Y Banco Santander corre con un propósito.