El desempleo juvenil en España es una de las cuestiones que más preocupan a los ciudadanos. En este momento, concretamente, y según cifras del Ministerio de Trabajo, la tasa de paro está en el 33,4%, lo cual nos coloca en un aprieto con respecto al resto de países de Europa.
Sin embargo, y a pesar de este porcentaje, hay oportunidades de tener un empleo estable y con futuro en algunos sectores de nuestra economía. Uno de ellos, es el sector de las redes eléctricas de distribución; eso sí, con la cualificación y la formación adecuadas.
En este sentido, Patricia Polite, responsable de Proyectos de Sostenibilidad y Economía Circular de Endesa, explica que «el proceso de electrificación –descarbonización de la economía– requiere de personas formadas para que haya un desarrollo óptimo y seguro de los trabajos».
De ahí que desde e-distribución, la filial de redes de Endesa, en colaboración con las consejerías de Educación de Aragón, Cataluña, Andalucía, Baleares, Canarias y Extremadura, se haya impulsado el programa de Formación Profesional Dual –también conocida como Formación Profesional Intensiva–, un modo de aprendizaje, a veces denostado con respecto a los programas universitarios.
Pere Riera es profesor del IES de Manacor donde se imparte esta Formación Profesional Dual. Para él, esta iniciativa “es un regalo impresionante, tanto para los alumnos como para los profesores. Nos permite a todos estar muy actualizados con las novedades del sector, ya que no es lo mismo tener sólo teoría que tener acceso a los ítems y a los materiales reales de las empresas distribuidoras con los que los chicos trabajarán en un futuro», comenta.
Sin esta formación, cree el profesor, «ni las empresas ni los alumnos se podrían adaptar al mercado. Para nosotros, que los futuros empleados estén formados en aspectos técnicos y en riesgos laborales es fundamental, en este sector no se puede tener margen de error porque la seguridad es prioritaria».
Un total de 465 alumnos de 27 Institutos de Formación Profesional que imparten la FP Dual podrán participar en este programa, el cual incluye un módulo específico de formación para conocer cómo se trabaja en las redes de distribución. “El objetivo es aumentar el número de alumnos año tras año y también, como compañía, seguir aprendiendo mientras colaboramos con las Administraciones”, aseguran en Endesa.
Esta iniciativa se complementa además con un piloto en un centro de Barcelona para impartir por primera vez en España el Certificado de Profesionalidad de Montaje y Mantenimiento de Redes Eléctricas de Alta Tensión de Segunda y Tercera Categoría que implicará la cesión de las instalaciones de Endesa para realizar las prácticas.
Estrechar las relaciones entre empresa y educación
Desde la compañía explican que el mundo de la empresa debe tener comunicación con los centros de formación de manera permanente, sin darse la espalda. «Nuestro objetivo es acercar a los estudiantes las necesidades y formas reales de trabajar de las empresas, así conseguiremos tener preparadas a las nuevas generaciones, formar a las actuales y también ayudar a otras personas a reciclarse profesionalmente», indica Polite.
Y en ello está trabajando Endesa desde hace tiempo, en mantener una relación viva con los centros educativos de los territorios en los que opera para crear oportunidades de empleos estables y de calidad. Una tarea fundamental para la modernización del sistema productivo en materia energética.
La empleabilidad es alta tras hacer esta formación: dos de cada tres personas salen con empleo. «Hacen prácticas desde casi el principio, así que suelen quedar en las empresas con las que trabajamos en Endesa», comentan desde la compañía. De hecho, según los datos de la Estadística e Inserción Laboral de Graduados de Formación Profesional, sólo el primer año de clase el 50% de los alumnos de la FP Dual tiene trabajo, un porcentaje que se eleva en los años siguientes.
Electrificación, impacto verde y positivo para todos
La electrificación es un proceso que no tiene freno. Sustituir los combustibles fósiles por la electricidad es una necesidad imperiosa para nuestro planeta, y para eso necesitamos trabajar por un modelo de país innovador, industrializado y moderno. «Tenemos que decir a la sociedad que el reto de la electrificación tiene un impacto positivo sobre todos nosotros, tanto desde el punto de vista individual como social, como para la estrategia de la compañía», indica Polite.
En este camino de descarbonización y reindustrialización, «las redes de distribución son fundamentales, son los canales por los que viaja la energía generada, pero a veces son las grandes olvidadas. Eso hace que haya falta de profesionales cualificados que las puedan trabajar, renovar y mejorar. Este es un problema que nos han trasladado nuestras empresas contratistas».
Todos estos procesos que van de la mano de la electrificación elevan las oportunidades de empleo, modernizan el país y contribuyen a frenar la despoblación rural. La Formación Profesional Dual es un proyecto «retador y motivador», apunta Polite, «porque es formación local para crear empleo y ayuda a ahorrar costes a nuestros proveedores, ya que ganan en eficiencia y competitividad al poder contratar perfiles de cercanía».
Espacio para perfiles diversos
Pero, tras este programa hay más retos. «Hemos conseguido sentar en la mesa a todos los grupos de interés del sector para poder reforzar estos programas de Formación Profesional Dual, así podemos contribuir a seguir formando a los futuros empleados de este sector, así como a los profesores que están liderando los programas de las escuelas de FP con 40 horas de teoría y 30 de prácticas de manera gratuita», determina.
Detalla, por último, que todos los perfiles tienen su oportunidad y su lugar en estos programas de formación y en el sector de redes de distribución: «Queremos atraer talento, también femenino porque, de momento, hay poca presencia de mujeres; buscamos despertar el interés de las personas, hacerles ver que es un sector atractivo, resiliente, en crecimiento y con una gran presencia de la innovación porque se pueden usar drones, robótica, Inteligencia Artificial (IA), etc.».
«Esta formación está teniendo una gran acogida entre los alumnos, ya que aprenden domótica, ingeniería, telecomunicaciones, baja tensión, distribución, etc. Y, además, ven que hay muchas oportunidades de trabajo, todos saldrán con empleo al terminar el ciclo. El mercado laboral del sector de las redes de distribución está muy bien, se buscan profesionales muy bien formados y estamos trabajando en ello», concluye el profesor Riera.
La importancia de las redes de distribución
Para Endesa las redes de distribución son primordiales, una de las claves de su estrategia. De hecho, desde este año y hasta 2025 invertirá 2.600 millones de euros en el desarrollo, modernización y ampliación de la red que gestiona su filial e-distribución, de los que 1.100 millones se destinarán a la digitalización de las infraestructuras para mejorar su eficiencia y resiliencia.
La red de distribución de Endesa alcanza actualmente los 316.500 kilómetros, una distancia que equivale casi a dar ocho vueltas a la tierra. Durante el pasado permitió llevar la electricidad a más de 12,5 millones de clientes repartidos por 27 provincias.
Según el informe Connecting the dots: Distribution grid investment to power the energy transition” de Euroelectric, E.DSO y Deloitte, las redes requerirán una inversión de entre 375.000 y 425.000 millones de euros en el periodo 2020-2030 en la UE + Reino Unido, lo que crearía hasta 500.000 empleos. Por tanto, podemos afirmar que con la formación adecuada es posible encontrar un futuro profesional en este sector.