Hoy en día, existen multitud de tratamientos y terapias alternativas con el fin de adaptarse a las necesidades de cada persona. Deporte, música o animales sirven para tratar terapéuticamente a personas mayores o con discapacidades para ayudarles a mejorar su capacidad física y funcional y fomentar sus relaciones interpersonales. Clece ofrece una técnica emocional que apacigua y satisface las carencias del usuario que padece demencia a través de una terapia con muñecas.
Clece lleva a cabo una continua labor de investigación para acercar lo último en terapias a los colectivos más vulnerables y, en ese sentido, es consciente de que las personas que padecen de algún tipo de enfermedad degenerativa como la demencia o el alzheimer, las dos enfermedades más comunes en este colectivo, requieren de una atención especial.
Debido a que el uso continuado de medicamentos acaba afectando negativamente al paciente, ha puesto en marcha la doll therapy, una técnica con muñecas que podría ser realmente útil para el logro de la reducción de sedantes y demás medicamentos.
Los beneficios de esta terapia son notables y visibles de manera inmediata. A nivel cognitivo, la realización de tareas cotidianas como recordar que hay que vestir, lavar, peinar y arreglar al ‘bebé’, así como tener en cuenta las atenciones que podría requerir para su correcto cuidado y atención, tales como alimentarlo o estar pendientes de si hay que cambiarles el pañal, consiguen beneficios en el aumento de atención y concentración del usuario además de mejorar la percepción sensorial mediante la estimulación táctil.
A nivel psicológico, también se extraen aspectos positivos de este tratamiento. Al estar a cargo de uno de los muñecos, los usuarios consiguen aspectos psicológicos fundamentales, como reducir la sensación de soledad, vacío y aislamiento, disminuir la posible ansiedad y estrés a la que se encuentran expuestos, mejorar el estado de ánimo y atención y, por último, aumentar la autoestima, mediante la estimulación del propio sentimiento de valía personal.
La realización de determinados movimientos que se ejecutan con el muñeco como cambios de pañales, cambios de ropa, peinarlos, lavarlos, acunarlos, darlos de comer y beber o pasearlos permiten estimular las habilidades motoras
Además de estos beneficios, hay diversos estudios que certifican que la doll therapy contribuye a la reducción de ansiedad y al realce de la comunicación, alienta a las personas aisladas a que participen de manera activa y contribuye a rememorar recuerdos, lo que ayuda a incrementar el sentido de la identidad, la satisfacción, el consuelo y la seguridad.
En 2016, Clece atendió a 548 personas mayores en las diferentes Estancias Diurnas y Temporales del Ayuntamiento de Valladolid. A todas las personas, con demencia o sin ella, se les presenta la doll therapy como una actividad transversal a la propia dinámica del centro; encontrando incluso residentes que «deseaban dormir con los bebes» por miedo a que nadie les acostara y les tratara como ellos; darles de comer, bañarles, mecerles incluso hacer la gerontogimnasia con ellos.
La empresa estima que aproximadamente un 20% de los pacientes encontró un significado a dicha actividad transversal, se relajó, mejoró anímicamente y permaneció alerta ante las necesidades de los ‘bebés’.
Esta terapia lleva tiempo aplicándose en los Centros de Día del Ayuntamiento de Valladolid (Estancias diurnas Delicias-Arca Real, Zona Este, Rondilla, Huerta del Rey, Zona Sur y Centro Integrado de Servicios a la Dependencia) y en los Centros de Día de Parayas y General Dávila pertenecientes al Instituto Cántabro de Servicios Sociales.
«Una vez, estuve trabajando con una mujer mayor que había perdido un hijo cuando era joven y siempre acababa llamando a gritos a su bebé. Preguntando por él, sufriendo por él. Un día, le dimos un oso de peluche durante uno de sus episodios y se calmó. Lo más impresionante es que desde entonces se sentía tranquila y feliz. Poco a poco, comprobamos que lo mismo ocurría con otros pacientes, fueran hombres o mujeres».