El envejecimiento de la población española es un fenómeno demográfico y social al que no podemos volver la espalda. Una tendencia que, según los expertos, no va a amainar en los años venideros. La población española que supera los 65 años de edad -y que en 1960 representaba el 8,2% del total-, ahora asciende al 19%. Una cifra que en 2031 se disparará al 25,6%, según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE). Ante tal escenario, y teniendo en cuenta que la esperanza de vida es cada día más alta en los países de la OCDE, la atención sociosanitaria a las personas mayores en sus domicilios es una necesidad y, además, una oportunidad laboral y de futuro.

Javier Gallego, responsable de Clece ante entidades de Intermediación Laboral, defiende que, efectivamente, “la ayuda a domicilio es una oportunidad laboral”, pero señala que “actualmente es complicado encontrar a personas con formación reglada para trabajar en el sector porque no terminan de formarse en este ámbito o prefieren trabajar en instituciones y hospitales”.

Por ello, desde Clece defienden que hay que poner en valor la Formación Profesional -tanto Grado Medio como Superior- de Auxiliar y Atención Sociosanitaria, así como el Certificado de Profesionalidad. Se trata de dos vías alternativas para poder incorporarse al sector de la ayuda a domicilio y, en definitiva, dos puertas abiertas a un mercado laboral que, a tenor de la demanda, irá ‘in crescendo’ en los próximos años.

Gallego afirma rotundo que en la actualidad hay “un déficit de personal formado en la atención de ayuda a los mayores en sus domicilios. Hay más demanda que oferta y no se puede cubrir toda la petición de servicio que viene de la Ley de Dependencia”.

Profesional del sector atendiendo a una persona dependiente en su domicilio (Foto. Istock)

No obstante, desde Clece creen que en los próximos años habrá un aumento de personas con formación específica para trabajar en el sector de atención a personas con dependencia. “Esperamos que se ponga en valor el cuidado de los mayores, es una labor poco reconocida”, por ello, señala Gallego, “se tendría que dar más difusión del FP para que se conozca que abre las puertas del mercado laboral”.

Con el fin de dar solución y respuesta al creciente número de personas que necesitan ayuda en sus casas, Clece asume el reto y el objetivo de brindar formación a aquellos candidatos que quieran trabajar en el sector. Sin ir más lejos, en el Servicio de Ayuda a Domicilio (SAD) de la compañía trabajan más de 17.000 profesionales especializados que atienden a más de 100.000 personas en su domicilio para mejorar su calidad de vida.

Gallego resalta que, además de dar una atención sociosanitaria, los profesionales que acuden a las casas de estas personas con dependencia “también hacen una labor social, pues mejoran la calidad de vida de los mayores y de su entorno familiar”.

Perfiles con vocación y formación específica

Hay que tener en cuenta, además, que la ayuda en el domicilio es un servicio que se ha profesionalizado en los últimos años, razón por la cual en la actualidad es imposible acceder como empleado sin una formación específica.

Rocío Márquez, responsable del área de selección de Clece en la zona centro, explica que “poco a poco estamos viendo cada vez más gente interesada, pero la profesionalización y la formación específica necesaria ha dilatado un poco más la incorporación de trabajadores al sector”.

Márquez asegura que se trata “de una profesión muy vocacional y tiene que gustarte”, pues explica que “todo trabajo que implique este tipo de contacto tan personal y tan cercano requiere de habilidades, no sólo profesionales, sino también sociales”. 

Laboral MAD: una cita para encontrar empleo

Se buscan perfiles con vocación y formación específica (Foto. Istock)

Para dar respuesta a la alta demanda de profesionales del sector, Clece ha organizado Laboral MAD, una feria de empleo que se celebrará los días 9 y 10 de mayo en la estación madrileña de Chamartín. El reto de esta cita profesional es reclutar a personal para la atención sociosanitaria a personas con dependencia en sus domicilios.

El primer día de la feria se centrará de manera exclusiva en generar oportunidades para personas de colectivos vulnerables. A través de las asociaciones colaboradoras con Clece, las personas con diversidad funcional, personas en riesgo de exclusión social y mujeres víctimas de violencia de género podrán aplicar a los más de 1.000 puestos de trabajo que la compañía oferta en Madrid.

El segundo día se abre las puertas a un público más amplio que podrá acudir a la feria, previa inscripción a través de la web, a buscar oportunidades de empleo en los más de 1.000 puestos disponibles en el Servicio de Ayuda a Domicilio (SAD), residencias de mayores y centros de día, principalmente en el sur de la región madrileña.

Se buscarán perfiles con vocación, flexibilidad de horarios y se dará prioridad a aquellos que cuenten con la formación específica de atención sociosanitaria y tengan una mínima experiencia en atención a personas mayores. No obstante, en caso de no contar con dicha formación o experiencia previa, Clece brinda la posibilidad de formar a los candidatos seleccionados.