Carolina Bucci, la diseñadora de joyas florentina que triunfa en la moda
Carolina Bucci es una de las joyeras italianas que está más en bogue, aunque lleva ya años adornando muñecas, orejas, cuellos y dedos de las manos de algunas de las mejores más bellas y elegantes del mundo. Sus joyas brillantes, coloridas y femeninas, realizadas en la ciudad toscana de Florencia, están en algunos de los joyeros más codiciados, y aunque leyendo esto puede parecer que hablamos de grandes joyas para eventos formales, sus piezas son ideales para embellecer nuestro día a día. Hoy exploramos más su historia para saber por qué triunfan tanto en el mundo de la joyería y en el mundo de la moda. Esta es la historia de la diseñadora de joyas Carolina Bucci.
Familia joyera
La familia Bucci es joyera. Su padre, joyero, también arreglaba relojes en su pequeño local de Florencia. Y Carolina, que veía a su madre abrir sus cajas de joyas, elegirlas y lucirlas cada día, empezó a percibir en ellas un vínculo emocional, más allá del elemento preciado que es. Que se dedicara a este mundo era cuestión de tiempo.
Siendo su ciudad la capital de La Toscana, su atelier está aquí, al igual que el pequeño taller en el que sus artesanos trabajan cada joya a mano. En el barrio de los orfebres de la ciudad, Oltrarno. Ya se sabe que en su puente más famoso, de 1345, solo encontramos joyerías. Por cierto, que para algunas de las joyas se utilizan algunas máquinas muy difíciles de encontrar, ya que en realidad son telares. ¿El resultado? Piezas brillantes, coloridas y femeninas, que pueden llevarse de uno en uno o apostando por el más es más… Cómo hace ella, que sin duda, es la mejor embajadora de su firma.
Joyas realizadas con un telar
Su padre es el que le ayuda a materializar todas sus ideas creativas. «Mi padre es mecánico de corazón» explica Carolina. ¿Cómo empezó? Con cinco modelos de pulseras de colores que empezó a utilizar en sus vacaciones en el exclusivo pueblo costero de Forte dei Marmi. Cada una de ellas representaba un valor: amistad, amor, felicidad, paz… Ahora esa primera colección de pulseras se ha ampliado a 25, y probablemente a ella se sumen más.
«La primera colección de Carolina Bucci, Woven, se creó utilizando un telar centenario diseñado originalmente para tejer textiles, pero adaptado para tejer hilos de oro y seda» explican desde la marca. De ahí la magia de sus joyas, son absolutamente inconfundibles.
Joyas llenas de color
A pesar de que Carolina Bucci es una persona extraordinariamente creativa, algunas de sus joyas pueden personalizarse en función de los gustos del cliente. Que, eso sí, entre sus gustos tendrá que tener el amor por el colorido. Porque así es el universo de esta joyera toscana. «También le damos mucha importancia a la talla», explica Carolina. «Una buena joya tiene que ser perfecta para ti». La de Bucci son, sin duda, ideales para muchas mujeres del mundo.