El restaurante COOL de la semana: Kiln
Como cada semana toca hablar del restaurante COOL de la semana. La pasada te recomendábamos conocer Fayer, en Madrid, y hoy nos trasladamos hasta Londres. Muy cerca de Piccadilly Circus, en pleno Soho, encontramos Kiln, uno de esos restaurantes que conocen bien aquellos que van a Londres a disfrutar de su gastronomía. Un restaurante que merece la pena ser apuntado en nuestra agenda foodie cuando podamos volver a volar a Londres. Es hermano de Smoking Goat, otra opción para cuando vayamos a la capital británica.
La dirección
Ubicado en en el 58 de Brewer Street, es un local oscuro -da igual la hora del día- con una enorme barra repleta de gente dispuesta a disfrutar de la gastronomía de Kiln a cualquier hora del día. Kiln, horno en inglés, es un restaurante en el que el fuego y las altas temperaturas son importantes. Ni el gas ni la electricidad se utilizan para cocinar.
La decoración
Kiln no necesita demasiado, lo importante aquí es la gastronomía. En la entrada, una enorme barra metálica que separa el fuego de la clientela. Y sobre la barra se van sucediendo los platos como en un baile. En algunos rincones encontramos plantas tropicales y vinilos, decoración que nos recuerda que la gastronomía que se disfruta en Kiln no es precisamente británica.
La cocina
Su carta es corta, pero justa para viajar por Asia a través de sus platos. Kiln tiene una carta que se centra en el norte de Tailandia pero con ella también viajamos a Birmania, Laos, Camboya… La idea es ir pidiendo algunos de los platos que encontramos y, como siempre recomendamos, dejarse aconsejar. Así nos vamos llenando y vamos probando un poco de todo. Todos los platos se sirven en pequeñas cantidades, en fuentes o platos de barro y en cuencos metálicos. Aquí lo importante es el interior, la decoración y la vajilla es completamente secundaria. ¿Algunos ejemplos? Brocheta a la sartén con comino, jungle curry de caballa ahumada, chuleta de cuello de guiñada a la parrilla, salchicha especiada al estilo norteño… Eso sí, muchos de los ingredientes son británicos, incluso los que tienen un origen tailandés.
«El productor Sean O’Neil y Thai Tana nos suministran nuestras hierbas y verduras tailandesas y chinas. Los cerdos de Tamworth son criados para nosotros por Fred Price en Somerset. Los mariscos en la lancha se entregan todas las mañanas», explican desde el restaurante.
El plato
Uno de los platos más icónicos de la cocina tailandesa es el curry… Y evidentemente en Kiln podemos probar muchos tipos de curry. Eso sí, cuidado, porque el curry puede picar, queda bien indicado en la carta. ¿Algunos de los platos que podemos pedir? La media langosta al curry, el curry frito de rape con su hígado, el curry de jengibre salvaje con cuello de ternera de Birmania o el curry de cordero al estilo sureño. Si no sabes decantarte por uno, pruébalos todos. Una manera fácil de viajar al sudeste asiática a través del tenedor.
El servicio
Hay que tener en cuenta que casi todo el restaurante se encuentra alrededor de la barra, por lo que los propios camareros cocinan muchos de sus platos. ¿Un consejo? Paciencia y dejarse aconsejar… Y por supuesto, disfrutar de cómo funciona la cocina. Y de cómo huele. Imposible perderse el espectáculo.