Maribel, el lujo alpino en Sierra Nevada
Nos apetece nieve. Y aunque siempre tenemos en cuenta destinos como Gstaad o Cortina d’Ampezzo, en nuestro país también hay sitios maravillosos en los que esquiar. Uno de ellos es Sierra Nevada, donde acaba de abrir sus puertas un chalet alpino reconvertido en hotel de lujo. Un hotel que pertenece a Marbella Club y Puente Romano Beach Resort, por lo que la sofisticación, los detalles y el mimo están asegurados. ¿Su nombre? Maribel, perteneciente a los Small Luxury Hotels of the World. Hemos estado durmiendo en una de sus habitaciones, hemos probado su restaurante y hemos descubierto sus rincones. Hasta hemos visto la nieve caer. Así es Maribel, el place to be de Sierra Nevada.
Maribel acaba de recibir a sus primeros huéspedes, incluidos nosotros. Hermanado con El Lodge Ski & Spa, Maribel sube el nivel en cuanto a la elegancia y a lo cool se refiere. Inspirándose en un chalet alpino, busca cuidarnos y que nos divirtamos a 2.550 metros de altitud. En Maribel hay ski y après ski. En pocas semanas la diversión podrá notarse en toda su magnífica terraza, con acceso directo a las pistas de Maribel y el Águila. Sus atardeceres serán los más bonitos de Sierra Nevada.
Sus 29 habitaciones y suites están adornadas con grandes camas para descansar de una jornada de esquí, balcones con vistas a la pista, todo lujo de detalles y una decoración alpina en la que no faltan los accesorios clásicos de este estilo de vida y buenos amenities, como los de Natura Bissé. A la entrada de la habitación no faltan cuidados de belleza après ski o gafas de sol para la pista.
En las zonas comunes: su maravillosa biblioteca, su bar de arriba, sofás de cuero y un billar para divertirnos cuando queramos. Lo divertido es que detrás de una de las bibliotecas hay acceso directo -y secreto- a las primeras habitaciones, todas con un nombre distinto: Mariola, Marisol, Mariela, Marijo… Siendo la más especial Maribel, la penthouse, en la tercera planta.
En su restaurante, el ambiente cambia de la mañana a la noche. Si por la mañana apetece un desayuno lento con vistas a la pista de esquí, por la noche las luces bajas convirtiendo a Maribel en el sitio de moda de Sierra Nevada. Su concepto de fine dining ha sido aplaudido, no existía otro lugar así. Djs locales mezclan música electrónica con flamenco, hacen bailar en la silla -sin movernos- mientras disfrutamos de las especialidades alpinas que no fallan en Maribel’s, su restaurante. La raclette, la sopa de cebolla, su consomé de res y cebada, su fondue... Platos que también comparten protagonismo con otros más sofisticados como su tartar de atún o de tomate o su carpaccio.
Maribel contará también con spa, por lo que la experiencia será redonda. Podremos relajarnos en él o disfrutar de sus tratamientos, leer al lado de la chimenea, desayunar tranquilos, cenar en el sitio de moda o tomar un vino en su terraza, con el sol en la cara. Maribel era el sitio que le faltaba a Sierra Nevada. Maribel es esta temporada, sin duda, el place to be.