Oskar Kokoschka y su exposición en el Museo Guggenheim hasta septiembre
‘Oskar Kokoschka. Un rebelde en Viena’, ese es el nombre de la exposición que homenajea al pintor expresionista austriaco. Una muestra que vamos a disfrutar durante todo el verano en uno de los museos más importantes del norte de nuestro país: el Museo Guggenheim de Bilbao. Fue un pintor rebelde, como el título de la exposición bien indica, y no dejó indiferente nadie. De lo que vamos a encontrar y de lo que supuso el trabajo del austriaco vamos a hablar a continuación. Por cierto, la exposición está disponible hasta el próximo 3 de septiembre.
Él presumía de no pertenecer a ningún movimiento artístico como tal… Pero sí, el expresionismo era el que mejor le definía y él lo sabía. «Soy un expresionista porque no sé hacer otra cosa que expresar la vida», defendía. Vaya si expresaba. Oskar Kokoschka fue además de pintor… Escritor, ensayista, poeta y dramaturgo, por lo que expresar expresó, y mucho.
Kokoschka fue compañero artístico de Gustav Klimt o Egon Schiele, quienes comenzaron carrera también en la Viena de principios del siglo XX. «El radicalismo de sus comienzos le llevó a ser blanco de los nazis, que le señalaron como representante del “arte degenerado”. Debido a la lucha contra el fascismo que mantuvo a través de sus obras, llegó a ser en una figura influyente en la reconciliación europea tras la Segunda Guerra Mundial y participó activamente en la reconstrucción cultural de un continente devastado», explican desde el Museo Guggenheim de Bilbao.
¿Y por qué es interesante esta exposición, si no se conoce la figura de Kokoschka? «Porque sus primeras obras escandalizaron tanto al público como a la crítica, que enseguida le calificó como “el gran salvaje” (Oberwildling). Su rica trayectoria personal y artística abarca la mayor parte del siglo XX, estando estrechamente ligada a los acontecimientos históricos de su tiempo», describen desde el museo.
Una exposición liderada junto al Musée d’Art Moderne de París que nos ayuda a conocer aun más la vida y obra de Kokoschka, un artista que no dejó indiferente a nadie y que fue rebelde en muchos sentidos. Un expresionista que no solo cautivó al mundo con sus paisajes y retratos, que no solo instauró esta vanguardia en su país… Lo más importante, es que fue una figura que apostó por la paz en un momento de la historia complicado. El arte, como solución, como via de escape para los momentos oscuros.