El truco de belleza de Anne Hathaway para aterrizar con 10 años menos tras un vuelo
¿Por qué no llevamos a cabo muchas de las rutinas de skincare que vemos viralizadas? Estoy segura de que si lanzamos esa pregunta al aire, un alto porcentaje de las respuestas señalan un mismo culpable: la falta de tiempo. Por eso debemos tomar prestado el ejemplo de Anne Hathaway y Jessica Chastain y aprovechar cualquier momento para incorporar rutinas antiaging. Y, generalmente, ¿cuándo solemos disponer de estas horas muertas? Efectivamente, en los viajes.
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Aprovechar las largas horas de avión entre destinos para incorporar los beneficios de las mascarillas faciales con efecto antiaging es un fenómeno que se ha viralizado, casi con la misma rapidez que los activos que incorporan. No es de extrañar, si tenemos en cuenta que cada vez vamos más de viaje. En cifras, Seguitur preveía a principio de año un crecimiento de los viajes internacionales a España del 10%. Y objetivo conseguido.
Anne Hathaway y su plan de relax
No es algo casual que los aviones se hayan convertido en spas antiaging personales improvisados. El hecho de que sean el medio de transporte hacia el cual nos trasladamos a los destinos vacacionales, nos predispone a adquirir comportamientos o rutinas que nos ayuden a relajarnos.
Incluso cuando el motivo de coger un avión sea todo lo contrario, teniendo por motivo un viaje laboral o un motivo similar, adquirir en nuestra rutina cuidados centrados en potenciar la relajación y cuidarnos conlleva múltiples beneficios para la salud. Sobre todo, porque aprovechando estos momentos para darnos un boost de cuidado, nos centramos verdaderamente en la importancia del bienestar. Incluso un artículo de Harvard Business Review señalaba la importancia del autocuidado para prevenir comportamientos contraproducentes con la salud personal.
Por qué las mascarillas
Uno de los pasos o productos que más tiempo llevan dentro del skincare antiaging son las mascarillas. Cada una está diseñada para proporcionar diferentes beneficios, pero todas ellas tienen algo en común: requieren de un tiempo determinado para que la piel absorba los ingredientes y disfrute de sus beneficios. Por eso resulta tan complicado a veces sacar ese tiempo extra para poder hacerlo en casa.
Rutina de colágeno
De la mascarilla de colágeno de Jessica Chastain sí que podemos decir que es uno de esos productos en los que el tiempo vale cuidado. Se trata de las mascarillas de colágeno transparentes, como la Collagen Recovery Mask de Masqmai que requieren de tres horas de aplicación para poder adquirir todos sus beneficios.
Estas requieren más tiempo para poder sumar al rostro el efecto de ingredientes como el colágeno hidrolizado y el ácido hialurónico de diferentes pesos moleculares y extractos de arroz y ginseng con aminoácidos y nucleótidos.
Eso sí, tanto tiempo merece la pena, para poder conseguir un rostro perfecto, iluminado y visiblemente más sano. Las mascarillas de Masqmai vienen en packs de 4 unidades y tienen un precio de 29,90 euros.