6 motivos por los que puedes ganarte el desprecio de tus compañeros de gimnasio

En las instalaciones deportivas podrás encontrarte todo tipo de personas. Muchos de ellos con unas manías y vicios que no resultan del todo agradables para la mayoría. Lo que para uno puede ser una simple tontería, para otro puede representar un gesto de menosprecio o de falta de respeto. Es posible que en más de una ocasión hayas recibido la mirada ‘asesina’ de algún usuario reprochándote algún comportamiento. A continuación te damos 6 motivos por los que puedes ganarte el desprecio de tus compañeros de gimnasio.

1-Abandonar las mancuernas en cualquier parte

Hay que dejar las pesas y las mancuernas como las encontraste. Lo más probable es que estén en unos soportes organizadas por su peso. Algunos por comodidad prefieren abandonarlas en el suelo porque les resulta más cómodo. También habría que dejarlas limpias de sudor una vez usadas.

2-Los ruidos al levantar peso

Cuando se hace un esfuerzo muy grande es bastante probable que alguien emita un grito que resuene en toda la sala. Seguro que se trata de alguien que levanta más peso de lo que puede. No deja de ser una reacción natural, que en algunos casos llega a alterar la tranquilidad que reina en la sala. En el caso de que precise algún tipo de ayuda para levantar peso no dude en pedir colaboración a los monitores.

3-Tomarse un respiro sobre una máquina

Entre cada uno de los ejercicios hay que tomarse un pequeño descanso, pero hay algunos que se entretienen demasiado y optan por quedarse sentados sobre el aparato en cuestión e incluso se atreven a revisar los mensajes del móvil. En ese tiempo posiblemente haya alguna persona interesada en hacer uso de la máquina.

4-Hablar por el móvil sin parar

Mientras estemos en el gimnasio ejercitándonos, lo más normal es que aprovechemos para desconectar. Eso implica olvidarnos del teléfono móvil durante unos minutos. En las clases colectivas ya se obliga en algunos casos a silenciar el dispositivo. Hay gente que puede ponerse a hablar sin parar sin reparar en que puede desconcertar al resto de deportistas del gimnasio.

5-Poner la música alta

La música sirve de motivación para entrenar, pero hay gente que se excede con el volumen y aunque lleve auriculares consigue que todo el mundo se entere del tipo de canciones que escucha. Tampoco hay que olvidarse de los que ponen directamente el altavoz para molestar a todo el mundo.

6-Muchas bicicletas libres, pero se colocan a tu lado

En más de una ocasión te habrá ocurrido que casi todas las bicicletas estáticas o elípticas estén libres, pero alguien decide colocarse justo a tu lado para alterar tu tranquilidad. Le mirarás con cara de pocos amigos, cómo preguntándole por qué se arrima tanto si tiene tanto espacio para él. En los entrenamientos necesitamos ponernos cómodos y estar tranquilos para ofrecer nuestro mejor rendimiento.