Por qué nos están cambiando para peor los teléfonos inteligentes

Por qué nos están cambiando para peor los teléfonos inteligentes
movil

Fact checked

×

Este artículo de OkSalud ha sido verificado para garantizar la mayor precisión y veracidad posible: se incluyen, en su mayoría, estudios médicos, enlaces a medios acreditados en la temática y se menciona a instituciones académicas de investigación. Todo el contenido de OkSalud está revisado pero, si consideras que es dudoso, inexacto u obsoleto, puedes contactarnos para poder realizar las posibles modificaciones pertinentes.

Antes resultaba imposible salir de casa sin llaves y sin cartera, pero desde la irrupción del teléfono móvil cada vez existe una mayor dependencia a este aparato, sobre todo con la aparición de los smartphones. Somos incapaces de estar más de una hora sin mirarlo, siempre pendientes de los mensajes o llamadas. De hecho queremos mostrarte por qué nos están cambiando para peor los teléfonos inteligentes.

Originan problemas que antes no existían y agudiza otros que ya había. No hay que verlo todo desde una perspectiva negativa, ya que sí somos capaces de darle un adecuado partido a estos aparatos, posiblemente nos beneficiemos de sus posibilidades. Sin embargo abusamos demasiado de su uso y eso acarrea en ocasiones serios problemas para la salud. Un vídeo que realizó hace unas semanas AsapScience recoge los cambios más visibles.

Explica que en el mundo existen más personas con acceso a un teléfono inteligente que a un wc que funcione. Algo cuanto menos curioso y que habría que ponerle remedio de alguna manera.

Cada vez resulta más frecuente que debido al uso de este tipo de teléfonos mostremos una espalda más curvada. Esto es debido a la posición que adoptamos cada vez que empleamos ordenadores, tabletas, smartphones, etc. Otro problema de salud que no pasa desapercibido hace referencia a los ojos. Pasarse tanto tiempo delante de este tipo de pantallas ha originado molestias importantes con el tiempo.

También es visible el cambio de hábitos que ha provocado el uso del móvil. Nos hemos acostumbrado a seguir una serie de acciones compulsivas y repetitivas, como puede ser disfrutar de uno de los juegos del teléfono en los ratos libres, desbloquear el dispositivo para comprobar posibles mensajes o estar pendiente de las redes sociales a todas horas.

Donde más se aprecian estas alteraciones de los hábitos y costumbres es en la gente más joven, que prácticamente han crecido con un móvil en la mano y son capaces de manejarse con soltura con estos dispositivos. Está comprobado que los adolescentes y niños más jóvenes usan el móvil para cualquier cosa y a todas horas, sobre todo cuando se encuentran en una fase de aburrimiento. En lugar de eso deberían aprovechar el tiempo para salir y relacionarse con los amigos, practicar ejercicio o disfrutar de otras propuestas como la lectura.

Hay gente que sufre un cierto agobio cuando tiene que estar desconectada durante unas horas o varios días, ya sea por falta de cobertura o porque se les estropee el teléfono. Se experimenta la sensación de estar alejado del mundo, de perderte algo serio.

Queda claro que existe una importante dependencia hacia los aparatos tecnológicos para llevar a cabo cualquier gestión o tarea del día a día. Por cierto, también puede provocar insomnio si nos acostamos con un móvil y damos un último repaso a nuestros mensajes. Es lo que se denomina insomnio tecnológico. Lo peor es apagarlos al menos una hora antes de meterse en la cama y no dejarlo encima de la mesilla.

 

Lo último en OkSalud

Últimas noticias