Disfruta de un «Otoño Mágico» en el Valle del Ambroz

Extremadura puede definirse como esa región española en la que la naturaleza y el ser humano se fusionan en un todo indivisible. Un destino que emana paz y tranquilidad en el que poder disfrutar desde las más altas cumbres hasta los ríos más caudalosos, desde los senderos más vírgenes hasta la fauna más increíble, desde los bosques más frondosos hasta el las ciudades más bonitas. Extremadura es vida, y Extremadura en otoño tiene un único protagonista: el Valle del Ambroz. 

El Otoño Mágico del Valle del Ambroz celebra su XX edición con una programación de bandera. Un evento declarado Fiesta de Interés Turístico Regional que está a pocos pasos de ser galardonado como Fiesta de Interés Turístico a nivel Nacional. Todo un avance desde que este acto comenzara hace ya 20 años con la única intención de enseñar la belleza del valle a todo turista con ganas de disfrutar de la naturaleza y la buena gastronomía. El otoño en Extremadura es precioso y el Valle del Ambroz es un buen lugar para comenzar tu ruta.

Un paraíso otoñal

Sí, el «veroño» parece haberse acabado de una vez por todas. Si eres una de esas personas que no está dispuesta a pasar día tras día cobijado del frío en tu casa te ofrecemos un plan diferente que te encantará: El Otoño Mágico del Valle del Ambroz. Una región situada en el corazón de Cáceres y presidida por dos altas montañas que se ven atravesadas por la potencia del río Ambroz. Las zona de vega se sitúan a solo 500 metros de altitud en un territorio en el que se aúnan las aguas de Garganta Ancha, el río Santihervás y, por su puesto, el río Ambroz. 

La suavidad de las montañas y la conocida deshesa extremeña se vislumbran a lo lejos de lo que conforma una de las «carreteras» más antiguas de nuestro país: la Vía Romana de La Plata. Todo un sendero de cordeles y cañadas reales en el que con gusto se perdería más de un aventurero. Una ruta con paradas obligatorias en Hervás, Baños de Montemayor, La Garganta, Aldeanueva del Camino, Abadía, Gargantilla, Casas del Monte y Segura de Toro. Sin duda, esta comarca cacereña de 8.000 habitantes se transforma por completo para celebrar una fiesta en la que la tradición y la naturaleza se aúnan conformando una experiencia inolvidable.

El otoño de tu vida

El Otoño Mágico comenzará su andadura el próximo 27 de octubre en el pueblo de Granadilla. Un evento con más de 70 actividades repartidas entre ocho pueblos extremeños que tendrán lugar cada fin de semana de noviembre incluyendo los días 1 y 2 de diciembre. Según datos oficiales, este festival consiguió reunir el pasado año a más de 25.000 asistentes. Unas cifras que planean batirse durante esta XX edición en la que se cuenta con un presupuesto estimado de 100.000 euros. Desde la Junta de Extrmadura ven el Otoño Mágico como un diamante en bruto que hay que pulir, por ello los esfuerzos económicos de este año recaen en una región en la que el otoño es una auténtica condicionen.

La música siempre está presente en el Otoño Mágico. Pero parece ser que este año han querido dar ese salto de calidad que se estaba buscando durante años. Entre las novedades musicales destaca la presencia de la conocida artista extremeña Bebe. Una actuación que tendrá lugar el próximo 11 de noviembre a las 23:00 horas en el cine teatro Juventud de Gervás. Sin duda, uno de los puntos clave de un festival repleto de actividades complementarias.

Un sinfín de actividades

La programación de este año llega bien cargada de todo tipo de actividades para disfrutar en familia, con amigos o en solitario:  rutas senderistas, música, teatro, poesía, deporte, gastronomía, rutas en bicicleta, concursos mercados de artesanía, jornadas informativas… Como puedes ver, el Otoño Mágico, no es un lugar en el que puedas aburrirte. Pero si tenemos que destacar una actividad sobre el resto nos fijaríamos en el «Viaje a las estrellas». Una ruta a través de los frondosos bosques desde los que la oscura noche no alberga horrores, sino estrellas resplandecientes en el firmamento. Todo un espectáculo.

Vive un otoño diferente paseando entre castaños mientras escuchas el crujir de las hojas amarronadas y disfrutas de la verdadera esencia de la naturaleza. Todo un paraíso al alcance de cualquiera que se presenta como una bocanada de aire fresco para afrontar el cambio de estación.