Se hace viral en redes gracias al zasca a su vecina negacionista

La convivencia en las comunidades de vecinos no es algo fácil de llevar. Los cuchicheos, las quejas y los ruidos a deshoras hacen que la convivencia sea complicada. Pues bien, a esto hay que sumarle el afán de algunas personas por intentar convencer a otros de que no se pongan la vacuna contra el COVID-19. Esto es precisamente lo que ha pasado en la comunidad de vecinos de un usuario de Twitter que no se ha quedado quieto y ha conseguido hacerse viral.

El usuario de Twitter ha compartido la respuesta que dejó en el cartel que una vecina había colocado en el portal y que difundía un bulo sobre la vacuna del COVID-19.

Como se puede observar en la propia foto que ha subido el tuitero se puede leer lo siguiente: «dígame, doctor, ¿por qué se me adhiere un imán en el punto donde me vacunaron? ¿Qué han introducido en mi cuerpo? ¿Reaccionará esto con los campos electromagnéticos? ¿Estoy a salvo, doctor?”.

La respuesta que dio el joven fue muy sencilla y muy clara: «Querida paciente: usted de lo único que no está a salvo es de su ignorancia”. En menos de un día, el mensaje llegó a acumular más de 10.000 me gusta y 1.000 retuits. Ahora la cifra es mucho mayor.

En mi edificio hay una negacionista y no me he podido resistir. Lo siento pic.twitter.com/IhLhMqYdle

— ۞ repompero (@smv__) June 7, 2021

El usuario ha querido aclarar que se trata de una vecina conocida que “no para de intentar convencer a las personas mayores que viven en el edificio de que ni se vacunen, ni usen mascarilla”. “Afirma que el covid no existe. Por eso es negacionista y por eso sé de lo que hablo”.

El bulo sobre los imanes en las vacunas del COVID-19

El cartel que colocó la vecina del tuitero hace referencia a un bulo que se ha extendido y que se ha difundido en las últimas semanas, un bulo que asegura que con la vacuna se introducen metales en el cuerpo. Como prueba, se afirma que si se colocan objetos como una cuchara en la zona del pinchazo, ésta se queda pegada a la piel por efecto de imán.

Claro está que esta información es completamente falsa. En la ficha técnica de ninguna vacuna figura ningún tipo de metal pesado o con propiedades magnéticas, la cantidad de esos metales que cabrían en una vacuna no podrían producir ese poder de atracción y la clave está realmente en la grasa y el sudor de la piel, que hace posible que los objetos se queden pegados.