El coronavirus sigue siendo una enfermedad misteriosa que ha sacado lo mejor y lo peor del ser humano. La guerra de las vacunas ha empezado, mejores o peores, de momento, son la única manera de luchar contra esta enfermedad. Nada ha conseguido para el avance de esta enfermedad por el mundo, solo el confinamiento se ha mostrado 100% efectivo. La ciencia sigue investigando un virus que no se sabe con exactitud ni cómo se contagia, tampoco se ha podido realizar un tratamiento que salvará la vida de las personas que reciben la peor parte de esta enfermedad. Ha llegado antes, y en un tiempo récord de 8 meses, no una, sino varias vacunas que aseguran evitar los terribles efectos secundarios del coronavirus.
Se disfrazan de ancianas para recibir la vacuna del coronavirus
Este virus sorprende día tras días. Si ya hemos perdido la posibilidad de conectar emocionalmente, con la obligación de llevar la cara cubierta, ahora se ha perdido hasta el sentido común. La fiebre por recibir la vacuna e inmunizarse, hasta no se sabe cuándo, ha llevado a dos mujeres a hacer lo imposible para recibir la vacuna.
En todo el mundo hay muchas ganas de volver a la normalidad. Las duras restricciones que llevan más de un año aplicándose, se suman a un toque de queda que ha dejado al mundo pendiente del reloj para volver a casa. Estas mujeres de poco más de 30 años decidieron ir en busca de la vacuna antes de tiempo.
Disfrazadas de ancianas se colaron en un proceso de vacunación en Estados Unidos. El médico del Departamento de Salud en Florida en el condado de Orange, Raúl Pinolas, descubrió al comprobar que la fecha de sus carnets de conducir no coincidía con la que se habían inscrito a la vacunación. Como todo lo que rodea a este virus, la velocidad y las conclusiones precipitadas, han llevado el mundo a cometer errores como éste.
Las vacaciones para ir en busca de la vacuna llevan a muchas personas que pueden permitírselo de Estados Unidos a viajar a Florida. En ese estado se vacunan a los mayores de 64 años. Han vacunado ya a casi 4 millones de personas, teniendo en cuenta que fueron poco más de 1 millón los contagiados y de estos 29.000 fallecieron, la vacuna está llegando a cifras récord.
Esta pandemia ha sacado lo mejor, en un confinamiento cargado de esperanza y lo peor, en un desconfinamiento cargado de restricciones. En unos meses quizás el mundo vuelva a cambiar y se recupere la normalidad, la vuelta a los abrazos y los besos sin miedo, el cariño y las sonrisas, las miradas de complicidad o la energía positiva nada más salir de casa. De momento, episodios como el que se ha vivido en Florida, sacan lo peor del ser humano.
La búsqueda de la vacuna que permitirá volver a la normalidad, la ansiada inmunización que pocos saben en qué consisten realmente. Las vacunas experimentales que deben acabar con el coronavirus están convirtiendo el proceso de vacunación en algo totalmente surrealista en algunos países. Todo es posible, tal como hemos visto en estos meses pasado.