LG presentará su nuevo buque insignia en la feria MWC

En contra de lo que se podía esperar, LG no ha presentado en CES una nueva generación de su smartphone curvo, el LG G Flex 2, y el único anuncio en este terreno han sido los económicos K7 y K10, que se confirma llegarán a nuestro mercado aunque no se sabe la fecha ni el precio. Sin embargo, parece que LG estaba reservando fuerzas para un anuncio muy importante de un smartphone que se desvelará en la próxima edición de la feria MWC 2016 que se celebra en Barcelona a finales de febrero. Este smartphone podría ser el próximo buque insignia de la compañía y podría ser la próxima generación de la serie G, es decir el LG G5, o directamente una nueva serie con cambios importantes en el diseño y concepto que podría adoptar una nueva denominación.

Este nuevo tope de gama adoptará por fin construcción metálica y dará un giro al concepto de la serie G llevando los botones de volumen a un lateral, dejando de lado por completo el diseño curvo que no acaba de hacerse popular para adoptar uno más plano y delgado, y con un ingenioso sistema para hacer la batería reemplazable sin tener que retirar la carcasa trasera.

Y es que, tanto la serie G Flex 2 como los G4 no han tenido el éxito esperado por el fabricante, lo que ha provocado un cambio de concepto en sus teléfonos como demuestra el lanzamiento del V10, un terminal de gama alta con diseño plano y construido en metal, aunque en este caso se mantienen los botones en la parte trasera. Así, para su nuevo buque insignia, LG podría dar un paso más en estos cambios que incluirían el retorno de los botones de volumen al lateral del teléfono (aunque habría que ver cómo argumenta LG este paso atrás tras años explicando que la parte trasera es el mejor lugar para estos botones).

Además de estos cambios, hay un elemento muy interesante que no está claro si llegará ya en este nuevo terminal que se presentará en la feria MWC, y es un curioso mecanismo para extraer la batería por la parte inferior del smartphone a modo de cajón o bandeja que se inserta en el cuerpo del móvil, como si extrajeses una tarjeta de gran tamaño. Este concepto ha sido visto por un testigo y basándose en su descripción CNET Corea ha creado un par de imágenes que muestran cómo podría funcionar. Al parecer, este diseño permite hacer el teléfono mucho más resistente a la entrada de agua y polvo a la vez que se mantiene una prestación a a la que LG no quiere renunciar como es la batería extraíble.

LG ha mandado ya el “save de date” (una especie de invitación previa) para la prensa para el 21 de febrero, aunque lo cierto es que la imagen de esta invitación con una especie de organillo y la palabra “play” parecen indicar que se trata de un anuncio relacionado con el sonido.

En todo caso, está claro que LG necesita un repulsivo importante en su serie G que ha tenido mucho éxito pero que pide a gritos una renovación para no caer en un continuismo que puede ser muy peligroso (y si no, que se lo digan a fabricantes como HTC).