La emotiva anécdota entre un yonki y un marroquí en el Metro de Madrid

Amianto
Varios pasajeros entran a un vagón del Metro de Madrid.
Iñigo Artola
  • Iñigo Artola
  • Portadista. Redactor de cultura, internacional, política, sociedad y lo que haga falta. Devorador insaciable de series y películas.

En este mundo que habita el ser humano, lleno de desgracias, corrupción y horribles crímenes, también existe la bondad. Esa disposición a ayudar al prójimo que, desgraciadamente, nos parece extraordinaria y poco común es la que mueve el mundo. Un tuitero, Lucas Sánchez, fue testigo de esta bondad en primera persona en un viaje en el Metro de Madrid y lo relató en un hilo que ha sido compartido más de 7.000 veces. Aunque desgraciadamente no tantas como el último disco de la diva de moda o la última superproducción de superhéroes.

El tuitero vio entrar en el vagón de metro en el que viajaba a una persona con evidentes problemas de drogadicción. A su lado un joven marroquí. El resto lo cuenta el propio Lucas:

Sin duda se trata de una anécdota, de las miles que suceden al día en el planeta, que demuestra que la bondad humana es necesaria y que hay que fomentarla. Esa persona necesitada de hoy, puedes ser tu mañana.

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